Ana Lucía rompe el silencio tras explosivos audios de Edwin Guerrero de Corazón Serrano

Ana Lucía Urbina ya no está dispuesta a guardar silencio. Luego de que se difundiera un polémico audio de Edwin Guerrero líder de Corazón Serrano en el que niega rotundamente los rumores de un supuesto embarazo, la cantante decidió salir al frente. Y lo hizo con fuerza.

En lugar de caer en la controversia, Ana Lucía usó sus redes sociales para lanzar un mensaje que no dejó indiferente a nadie. “Este año conocí la versión más rota de mí, pero también la más fuerte”, escribió en Instagram, dejando claro que el dolor no le ha quitado las ganas de brillar. A pesar del ruido mediático, Urbina se enfoca en su crecimiento artístico y en mantener la cabeza en alto. “No le daré el gusto a nadie de verme triste porque sé lo que soy”, sentenció con firmeza.

La relación entre Ana Lucía y Edwin no ha sido una historia sencilla. Se conocieron en 2017, terminaron en 2021, y tres años más tarde, en 2024, decidieron darse otra oportunidad. Pero esa reconciliación estuvo marcada por el dolor: poco después de volver, la pareja sufrió la pérdida de un bebé. Fue un golpe devastador para ambos, pero especialmente para ella.

En una entrevista reciente, Ana Lucía fue transparente al contar cómo volvieron: “Él estaba con alguien más. Ya habíamos salido a cenar y le dije: ‘Tú me amas, me adoras, termina con esa persona, dile que me amas a mí y que te vas a casar’. Y él me respondió: ‘Cásate conmigo’”. Según relató, Edwin dejó esa relación y regresó con ella. Incluso, le juró amor eterno: “No quiero que estés con nadie, yo te amo”, recordó la cantante.

Urbina no se guardó nada. Confesó que en ese momento, su amor era tan fuerte que estaba dispuesta a casarse con él. “Yo lo amaba. En ese momento, sí, me habría casado”, admitió con emoción. Fue durante esta etapa que quedó embarazada, lo que hizo aún más íntimo y esperanzador ese capítulo de su historia.

Pero todo se quebró, otra vez. Una tercera persona, no identificada, habría sido la razón detrás de la nueva ruptura. Ana Lucía lanzó una reflexión cargada de indirectas: “Creo que los hombres no son tontos; saben para qué es cada persona... Las mujeres conocen quién es para presumir y quién es para ocultar”.

La ruptura definitiva llegó tras la pérdida del bebé. Ana Lucía, con la voz entrecortada, confesó que el dolor fue aún mayor al sentirse abandonada. “Cuando me embaracé y perdí al bebé, terminamos, y él puede llevar su vida como quiera. ¿Sientes que a él le faltó darte respaldo? Sí, un poco. Me quedé sola, y eso fue lo que más me enfureció”.

Hoy, lejos de hundirse, Ana Lucía se levanta desde sus cenizas. No está para escándalos ni para dar explicaciones. Está para seguir brillando, a su ritmo, con su música y su verdad.