¿Qué alimentación refuerza el sistema inmune de un paciente COVID-19?

La alimentación en pacientes con COVID-19 es muy importante y necesaria de acuerdo a las necesidades de su organismo. En este caso es fundamental elevar las defensas del organismo, por ello se debe mantener una preparación determinada que beneficie y mitigue las secuelas de la infecciosa enfermedad.

Al respecto, el decano nacional del Colegio de Nutricionistas del Perú, Antonio Castillo Carrera, comentó que las personas infectadas con la enfermedad no deben descuidar su alimentación o hábitos saludables. Es decir, deben tener una alimentación adecuada, hacer ejercicio y dormir las horas adecuadas.

“Para alimentarse de forma adecuada, hay que saber elegir los alimentos; se debe incluir siempre macronutrientes como proteínas básicamente de origen animal: carne de res, pollo, pescado, huevo, lácteos o vísceras", explicó el nutricionista.

Asimismo, señaló que una buena nutrición permite fortalecer nuestro sistema inmunológico, el cual es responsable de luchar contra enfermedades e infecciones tan complejas como la COVID-19. "También se deben incluir verduras, ellas proporcionan vitaminas y minerales que fortalecen el sistema inmunológico”, agregó.

Es importante mencionar que, muchos pacientes de COVID-19 han desarrollado cuadros graves de la enfermedad, por ende han requerido estar entubados. Frente a ello, se presentan dificultades para deglutir o se encuentran en una situación depresiva.

“Es muy importante no forzar a las personas a comer, pero si tiene la disposición a hacerlo hay que buscar alimentos de consistencia blanda, tipo puré, papillas o sopas que pueden procesar de mejor manera. No olvidar que la garganta se ha visto afectada y no va a poder pasar los alimentos como antes, al menos por un tiempo”.

Castillo Carrera recomendó consumir leche, yogur bajos en grasa o jugos variados, ello porque contienen una dosis importante de vitamina C. Recordemos que se trata de un componente importante que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, además, es un gran antioxidante que previene resfríos.

“No olvidar que la vitamina C es muy volátil, se evapora rápidamente. De igual manera es muy sensible a la luz. Si se va a preparar un jugo de papaya o naranja debe tomarse allí mismo cuando se prepara. De lo contrario, podría optarse por comerla en su presentación natural”, expresó.

Para el licenciado, no se requiere abundancia para estar bien alimentado, solo consumir las cantidades correctas de macronutrientes (proteínas, carbohidratos, grasas).  “No se necesita una fuente de comida para estar saludable. Solo deben respetarse las cantidades adecuadas”, comentó.

Por ello, el plato debe estar conformado por alimentos de origen animal, es decir de pollo, carne, cerdo, pescado, vísceras, entre otros. Estas presas no pueden exceder el tamaño de la palma de la mano para que esté en una medida adecuada.

Además, es necesario consumir carbohidratos, ya que brindan la energía necesaria en el organismo. Se puede encontrar en los tubérculos como las papas, camotes, yucas, legumbres, arroz, trigo, avena, quinua, entre otros. Deben estar presente en cada comida principal y de preferencia no superar el tamaño de nuestro puño.

Finalmente, Castillo Carrera señala que es esencial comer verduras por la cantidad de vitaminas, grasas saludables y diversos nutrientes que aportan al ingerirse de manera habitual. La cantidad adecuada de este alimento es por lo menos la mitad del plato.

Igualmente, sugirió reemplazar el arroz cada vez que se pueda por otras guarniciones que también aportan energía como la yuca, el camote, la papa, el trigo o la quinua. Además, si las personas tienen hambre entre comidas pueden optar por frutos secos o frutas, así se evita consumir alimentos procesados que solo aportan azúcares.

Para el especialista, alimentarse bien no implica un derroche de dinero, pues este objetivo puede lograrse fácilmente con compras inteligentes.

“Si hablamos de calidad estamos hablando de calidad nutricional. Si quiero proteínas de alta calidad de origen animal siempre pensamos en pescado, pollo y carne, pero esas mismas proteínas las podemos encontrar en opciones más económicas en las vísceras como la sangrecita, el hígado, el bazo, las mollejas, los riñones, que tienen una gran cantidad de hierro”.

Sobre las verduras, comentó que son económicas siempre y se debe consumir de distintos sabores para complementar el almuerzo. Los tubérculos son igualmente baratos. Las menestras nunca deben faltar y deben comerse como mínimo dos veces por semana.

“Un aspecto muy importante es la hidratación. Tomar agua hervida o embotellada, tomar sopas de verduras, de carne sin grasa o infusiones. Evitar las gaseosas, jugos envasados o bebidas deportivas, porque estas no aportan nutrientes. Tienen un alto contenido de cafeína, taurina, estimulantes que podrían modificar la acción de antibióticos o antiinflamatorios”.

El nutricionista Antonio Castillo destacó que la buena alimentación es un factor protector ante cualquier tipo de infección, incluido el coronavirus, pero no evita que uno pueda contagiarse.

“Es bueno destacar que sus efectos serán más graves si la persona tiene un sistema inmunológico disminuido debido a una mala alimentación y factores de riesgo como el sobrepeso y la obesidad, un índice de masa corporal superior a 30 o problemas como la diabetes, hipertensión, triglicéridos altos", sentenció.

En la misma línea comentó que si una persona que se alimenta de manera adecuada, tiene hábitos saludables y realiza actividad física tendrá un sistema más fortalecido para repeler de mejor manera el ataque de cualquier virus.

Son muchos los alimentos naturales que pueden ayudar a fortalecer la línea de defensa del organismo. Algunas recomendaciones por parte de la Clínica San Felipe son:

1.- Incluir en la dieta hierbas naturales y especias como ajo, cebolla, kión, orégano y cúrcuma.

2.- Consumir alimentos ricos en vitamina A y betacarotenos: camote, zapallo, zanahoria, papaya, etc.

3.- Alimentos con vitamina C: cítricos (naranja, mandarina, fresas, arándanos), pimientos, brócoli, kiwi, aguaymanto.

4.- El zinc es clave para nuestro sistema de defensas. Lo podemos encontrar en semillas de calabaza (las puedes incluir en tu avena o ensaladas), frutos secos y menestras.

Además, es necesario pasar al menos 30 min al sol cada día con ropa clara o descubierta para producir vitamina D. En el caso de que no puedas hacerlo, debes evaluar la toma de un suplemento según tus requerimientos por edad y sexo.

Son una extensa familia de virus que pueden causar enfermedades tanto en animales como en humanos. En los humanos, se sabe que varios coronavirus causan infecciones respiratorias que pueden ir desde el resfriado común hasta enfermedades más graves como el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) y el síndrome respiratorio agudo severo (SRAS).

Por su lado, la COVID-19 es la enfermedad infecciosa causada por el coronavirus que se ha descubierto más recientemente. Tanto el nuevo virus como la enfermedad eran desconocidos antes de que estallara el brote en Wuhan, China, en diciembre de 2019.

Algo determinante de esta enfermedad es el grupo sanguíneo que más es afectado por el coronavirus. En este caso el Dr. Nicolas Veller señala que el tipo sanguíneo A sería el más propenso a contagiarse, por ello es importante mantener el metro de distancia con las personas y usar constantemente la mascarilla.

La variante Delta del coronavirus, que amenaza el levantamiento de las últimas restricciones en el Reino Unido, se transmite un 40% más que la variante Alfa hasta entonces dominante en el Reino Unido, dijo el domingo el ministro británico de Salud, Matt Hancock.

Haber recibido dos dosis de las vacunas Pfizer/BioNTech o AstraZeneca/Oxford protege eficazmente de una hospitalización a causa de la variante Delta del coronavirus, identificada inicialmente en India, señaló un estudio de las autoridades sanitarias de Inglaterra.