De Goku a Inuyasha: la lista de peruanos que recibieron nombres de animes en el Día Mundial del Otaku
Únete al canal de Whatsapp de WapaEn el marco del Día Mundial del Otaku, una peculiar tendencia en Perú ha salido a la luz: padres eligiendo nombres de personajes de anime para sus hijos. Esto se pudo conocer gracias a una publicación realizada por el Registro Nacional de Identidad y Estado Civil (RENIEC).
La lista de nombres de animes que recibieron los peruanos, según RENIEC
Según el RENIEC, nombres como Goku, Benji, y Gregory no son tan raros como podría pensarse. Incluso, en algunas regiones del país, nombres más elaborados como Oliver Atom, Saitama e incluso Naruto se han colocado a ciudadanos peruanos.
El anime ha tenido un impacto significativo en la cultura popular peruana desde los años 90 formando parte de la infancia de muchas generaciones. Hoy, ese legado se refleja en las actas de nacimiento de varios peruanos.
Esta es la lista de peruanos que fueron llamados con los nombres de personajes principales de famosos animes japoneses:
- Saori: 9 mil 221 personas.
- Gregory: 3 mil 564 personas.
- Aiko: mil 743 personas.
- Benji: mil 3 personas.
- Sakura: 576 personas.
- Eren: 511 personas.
- Gohan: 330 personas.
- Misaki: 191 personas.
- Shen: 154 personas.
- Tanjiro: 39 personas.
- Nezuko: 17 personas.
- Tsubasa: 14 personas.
- Naruto: 10 personas.
- Luffy: 10 personas.
- Goku: 8 personas.
- Zoro: 8 personas.
- Inuyasha: 8 personas.
- Shaka 8 personas.
- Oliver Atom: 3 personas.
- Saitama: una persona.
Día Mundial del Otaku: una tendencia en crecimiento
No solo los personajes principales tienen su espacio en los registros. Secundarios como Misaki, en referencia a Tom Misaki de Super Campeones, o el propio Tsubasa por su versión japonés, también han sido seleccionados, mostrando que los padres tienen una amplia gama de influencias.
Expertos señalan que elegir nombres de personajes de anime refleja un deseo de los padres por transmitir los valores asociados a esos héroes: valentía, amistad y perseverancia. Goku, por ejemplo, es sinónimo de lucha y superación.
Aunque muchos celebran esta expresión cultural, otros critican la tendencia, argumentando que podría generar problemas a los niños en el futuro. Todo hace indicar que la controversia continuará, ya que no existe ningún impedimento para colocar dichos nombres en el Perú.