Después del Perú, ¿QUÉ PAÍS consume más la Inca Kola? La respuesta te sorprenderá

Aunque Inca Kola es la gaseosa emblema del Perú, su presencia en el extranjero no pasa desapercibida. En los últimos años, ha logrado ganar terreno en nuevos mercados. Un país en particular se ha convertido en su segundo gran consumidor. ¿Te imaginas cuál es el segundo país que más la bebe?

Durante el primer semestre de 2024, Inca Kola reafirmó su presencia internacional con un crecimiento notable en sus exportaciones. La emblemática bebida dorada logró envíos por USD 2,4 millones, lo que representa un avance del 13% respecto al mismo periodo del año anterior. En total, se distribuyeron 2,4 millones de litros en 13 destinos alrededor del mundo.

Entre todos los países importadores, Chile se ubicó a la cabeza, concentrando el 50% del valor total (USD 1,1 millones). Le siguió Bélgica con el 26%, mientras que Japón y Estados Unidos empataron en relevancia, cada uno con el 5% del monto, según cifras proporcionadas por el Idexcam. La tendencia al alza ha sido constante durante los últimos tres años.

A nivel local, el impacto de Inca Kola sigue siendo excepcional. La bebida no solo lidera el mercado peruano de gaseosas, sino que supera incluso a Coca‑Cola, algo que ocurre en muy pocos países del mundo. En cifras, Inca Kola alcanza entre un 26% y 37% de participación, dependiendo del tipo de estudio aplicado: ventas concretadas o intención de compra declarada.

Este posicionamiento se refleja también en los rankings globales, en el 2024, Brand Footprint de Kantar, ubicó como la marca de consumo masivo más elegida por los peruanos, en una clasificación donde Coca‑Cola aparece en segundo lugar. Un reconocimiento que confirma el vínculo emocional y cultural entre el Perú y su bebida más icónica.

La historia de Inca Kola es mucho más que la de una simple gaseosa: es el relato de cómo una bebida local conquistó un país entero y obligó a un gigante mundial como Coca Cola a rendirse ante su sabor. Su origen se remonta a 1935, cuando el inmigrante inglés José R. Lindley decidió crear un refresco que representara el espíritu del Perú. Su fórmula, a base de ingredientes como hierba luisa y lima, no tardó en ganarse el paladar de toda una nación.

Con el paso del tiempo, la botella verde y el icónico logo del inca se transformaron en símbolos de identidad nacional. Para los años 60, Inca Kola ya era líder en ventas, superando incluso a Coca Cola. Su éxito no solo se explicó por el sabor, sino también por campañas que exaltaban sus raíces peruanas y su conexión cultural con el país.

En 1999, la multinacional Coca Cola decidió adquirir Inca Kola como parte de su estrategia de expansión regional. “A Coca Cola no le quedaba otra opción que comprar Inca Kola para lograr el liderazgo de mercado en el Perú, objetivo que la empresa persigue en todos los países donde está presente.” Así lo afirmaron expertos al analizar esta jugada decisiva para el gigante estadounidense.

Hoy en día, Inca Kola no solo reina en su tierra de origen, sino que ha cruzado fronteras y se vende en países como Estados Unidos, Chile, Ecuador, Bolivia, Panamá, Costa Rica, Canadá, España y varias naciones europeas. La adquisición no solo permitió a Coca Cola reforzar su portafolio en América Latina, sino también ofrecer una bebida con auténtico arraigo local, adaptada al gusto regional.