Donald Trump confirma la mayor deportación de la historia: Adiós al sueño americano
Únete al canal de Whatsapp de WapaEl arrollador triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales no habría sido posible sin el apoyo de la comunidad latina, los cuales habrían llevado nuevamente al expresidente al poder.
El cambio en el voto hispano, históricamente inclinado hacia los demócratas, catapultó al republicano que ha hecho de la lucha contra la inmigración su bandera. A lo largo de su campaña, Trump ha sostenido un discurso xenófobo, acusando a los migrantes de ser criminales que “envenenan la sangre del país” y, en sus declaraciones más controvertidas, ha llegado a afirmar que tienen “genes malos”.
Aunque Trump se ha distanciado de tales comentarios, se prevé que el Proyecto 2025, impulsado por un grupo radical de seguidores, sirva como base para su política migratoria.
Donald Trump anunció la mayor deportación de la historia
Los latinos ciudadanos de Estados Unidos que votaron por Trump no se sienten aludidos por las amenazas del expresidente, pero de cumplir sus promesas contra la inmigración, se estima que unos 19 millones de latinos podrían verse afectados. Esta cifra no solo incluye a los migrantes indocumentados, sino también a sus cónyuges, hijos y otros familiares cercanos. De cumplirse sus amenazas, esta sería la mayor deportación en la historia de EE.UU.
Una de sus promesas más destacadas fue ejecutar la mayor deportación de migrantes indocumentados de la historia, afectando a unos 11 millones de personas. Trump planea respaldar esta medida con la "Operación Aurora", una ley utilizada en tiempos de guerra que autoriza la expulsión de aquellos considerados enemigos del país. Desde su promulgación a fines del siglo XVIII, esta ley solo se ha aplicado en tres ocasiones: la guerra de 1812, la Primera Guerra Mundial y la Segunda Guerra Mundial. Las organizaciones latinas de derechos civiles advierten que la operación no se limitaría a los migrantes sin papeles.
Trump ha repetido en varias ocasiones que los migrantes indocumentados son criminales, equiparándolos con ladrones, asesinos y violadores, y los considera enemigos del país. Además, los acusa de robar empleos a los estadounidenses y generar desempleo, aunque los estudios sugieren que una deportación masiva tendría consecuencias negativas para la economía del país. Los migrantes indocumentados suelen ocupar trabajos que los estadounidenses no quieren desempeñar, como los del sector agrícola, y contribuyen al sistema de impuestos y la seguridad social, sin beneficiarse de ellos.