Citlali, la niña que combate su enfermedad celebrando sus 15 años

Dicen que los problemas tenemos que enfrentarlos con una sonrisa, porque así será mucho más fácil vencerlos. Pero ¿es posible ver el lado positivo o poder sacar una sonrisa cuando tienes una enfermedad terminal? La historia de Citlali nos demuestra que sí.

Pues, Citlali nos demuestra que sí es posible. Ella sonríe cuando escucha que hacen clic de la cámara. La adolescente posa como toda una modelo, pues quiere mostrar su hermoso peinado y lo genial que luce su manicure.

En este momento Citlali se olvida que todos los lunes, miércoles y viernes tiene que recibir la transfusión de plaquetas para que pueda vivir, pues padece de deficiencia de proteína C y amaurosis bilateral, una enfermedad que se presenta con pérdida completa de visión.

Aunque los médicos le habían asegurado que solo viviría tres años, el 03 de agosto Citlali cumplió 15 años y ella lo quiso celebrar “en grande”. Como el Hospital Infantil de México Federico Gómez (HIMFG) se ha convertido como en su segundo hogar, no hay mejor lugar para celebrar un día especial.

“Llegó cuando apenas tenía 12 días de nacida. Los médicos me dijeron que solo viviría tres años, por mucho. Por eso es una satisfacción muy grande verla cumplir 15 y festejarlo”, aseguró Bianca Zamora, madre de Citlali.

La adolescente ha vivido toda su vida entre el hospital y su casa, pero esto no ha hecho que se le borre la sonrisa. En este día tan especial, ella se olvida de todos los problemas, de su enfermedad y solo disfruta de su fiesta.

“Me siento feliz, no me lo esperaba. Muchas gracias”, dice Citlali, quien está agradecida no solo por la fiesta, sino también por la atención que le han dado a lo largo de este tiempo en la institución. “Ellos me atienden bien, son muy buenos enfermeros conmigo. Los quiero mucho”, añade.

Pero Citlali no es la única que festeja su quinceañero, pues 15 niñas más festejan con ella. “Llevamos cinco años que lo hacemos. Ellas son pacientes del hospital. La intención es darles un día feliz, diferente, que vean que son las consentidas”, dice Mitzi Chávez, coordinadora del voluntariado del HIMFG.

Según cuenta Mitzi, este evento en el que las niñas son felices es posible gracias al apoyo de 200 personas. “Principalmente por los voluntarios, ellos gestionan, también la gente externa, chambelanes, personal médico, por parte de una enfermera este año fue el mariachi, una chica de administración nos dio las flores”, dice.

Cuando uno desea hacer feliz a los demás no existen los imposibles, por eso, el Área de Recreación, Cultura y Aprendizaje del Hospital, que generalmente se utiliza como biblioteca, para este evento se convirtió en un enorme salón de belleza, aquí lo decoraron con luces y mucho glamour. En el ambiente solo hay sonrisas de madres e hijas.

La mayoría de las quinceañeras no cuentan con los recursos económicos para hacer su fiesta soñada, pues las enfermedades incurables tienen tratamientos muy costosos y como es lógico la familia tiene como prioridad la salud de las adolescentes.

Estas 15 chicas disfrutan el momento entre aplausos, sonrisas, mariachis. Solo por este momento tratan de olvidar tratamientos, jeringas y medicamentos.