Luis Davelouis: “Le pido perdón porque vivió un infierno”

El pasado domingo, a través de su cuenta de Twitter, la periodista Marissa Chiappe denunció que fue víctima de agresión física y emocional por parte de una expareja que también es un conocido comunicador.

Chiappe nunca mencionó el nombre de su agresor, pero muchos especularon que se trataría del periodista de Chicharrón de prensa, Luis Davelouis.

Luego de 48 horas de las graves denuncias de la periodista, Luis Davelouis decidió contar “su verdad”, para eso aceptó una entrevista con Juliana Oxenford en Exitosa.

“Es difícil asumir-las acusaciones de agresión en su contra-(…) Le pido perdón porque leyendo sus tuits, yo honestamente no me reconozco, veo que la pasó pésimo y que vivió un infierno. En efecto tuvimos una relación súper tóxica y codependiente. Muy intensa, con muchos altibajos y muy inestable, eso es verdad”, comentó el también analista político.

En la entrevista, Davelouis afirma que sí tuvo una relación tóxica, pero también dice que nunca fue violento con ella.

Juliana Oxenford le pregunta si reconoce que él agredió a Marissa Chiappe, Luis responde que “no de esa manera y de verdad nunca fui violento ni agresivo con ella. Una cosa importante, yo sí tuve un problema de alcohol, pero mi comportamiento no es agresivo”.

Durante toda la entrevista al periodista se le oía con una voz apagada sin energía, muy diferente a como se le oye cuando defiende algunos casos de maltrato hacia la mujer.

"He sido tosco, probablemente, nunca la toqué, nunca la insulté, nunca la hice sentir menos", aseguró el conocido periodista.

Escucha aquí la entrevista radial.

Asimismo, a través de un comunicado, aseguró que: "No tengo interés alguno en revindicar mi nombre por mí. Primero, porque eso no será posible después de esto, menos aún tras ver a algunos de mi “amigos” sacudiéndose mi nombre luego de haber estado tantas veces en mi casa y conocerme como me conocen a mí y conocieron mis relaciones, a veces de muy cerca. Segundo, porque ya perdí mi trabajo, amigos y clientes que decidieron qué era verdad sin preguntar, bien por principio político, bien por miedo a los que deciden por principio político sin necesidad de más información que la que sienten alineada con sus propios ardores o pasados sin preguntarse -ni preguntar- ni cuestionar si lo que tienen delante tiene sentido, aunque sea por ejercicio lógico. Nada científico, nada periodístico. Solo me interesa dar mi versión por mi familia a la que le pido perdón por hacerlos transitar esto conmigo. Después de todo, lo que nos pasa, merecidamente o no, son las consecuencias de las decisiones propias que creemos casi siempre libres casi siempre informadas".