Alejandra Baigorria celebra su despedida con un vibrante estilo vaquero pink

Alejandra Baigorria ya empezó a vivir la emoción previa a su boda con Said Palao, y lo hizo a lo grande: armó maletas y voló a Colombia para celebrar su primera despedida de soltera. Como había anunciado, tendrá más de un festejo antes de dar el “sí, acepto”, y esta primera parada fue con sus amigas más cercanas, incluida la modelo argentina Flor Ortola.

Lo que no pasó desapercibido fue el look elegido por Alejandra: un total pink con toques vaqueros que dejó claro que el estilo no se va de vacaciones. El outfit fue protagonista de esta escapada, marcando tendencia con un aire festivo, atrevido y chic, ideal para una bride-to-be que sabe brillar.

Alejandra Baigorria despidió su soltería con mucho brillo, estilo y una dosis poderosa de Barbiecore en clave vaquera. Rumbo a su pedida de mano con Said Palao en la soñada Catedral de Liam, la ‘Gringa de Gamarra’ llevó el glamour a otro nivel con un look comfy chic perfecto para viajar, pero sin dejar de brillar. Apostó por un short denim, una polera blanca básica, botas vaqueras blancas y el gran protagonista: un sombrero vaquero rosa con flecos y brillos, ícono absoluto de la tendencia cowgirl glam. Alejandra dominó el arte de mezclar comodidad y estilo, mientras sus invitadas elevaron la vibra del momento en un total Barbie look, con poleras rosadas, lentes y sombreros vaqueros pink. Una despedida de soltera donde la estética Barbie se encontró con el oeste moderno, marcando tendencia y dejando claro que Alejandra no da un paso sin estilo.

El sombrero de vaquero rosa se ha convertido en el nuevo accesorio estrella del momento, especialmente entre novias, fashionistas y celebridades que apuestan por un estilo divertido con un toque western chic. Su encanto radica en la fusión de lo clásico con lo atrevido: el diseño tradicional del cowboy hat se reinventa con el color rosa, que transmite feminidad, poder y una vibra festiva perfecta para celebraciones como despedidas de soltera.

Más que un simple accesorio, este sombrero es una declaración de estilo. Combinado con looks monocromáticos, lentejuelas o prendas de inspiración Y2K, aporta actitud y glamour instantáneo. Su presencia en redes sociales lo confirma: el pink cowgirl vibe está arrasando y promete quedarse como ícono de la temporada.