¿Quieres mejorar el estado de tu piel? Aplica estos tips para cuidar tu rostro

El verano llegó con ganas de que el sol rozara la piel. Ese primer contacto desveló que necesitaba cuidados extra, de la misma manera que a punto de entrar el otoño por la puerta es el momento de liberarla de los estragos de la sal, el sol y las manchas.

A pesar de haber vivido un periodo estival atípico, la vuelta a la rutina siempre implica enfrentarse a los daños provocados por la sal, el cloro y especialmente la radiación ultravioleta sobre la piel.

Las manchas faciales, como efectos colaterales de una exposición inadecuada al sol, son una de las consultas más habituales en esta época del año.

El dermatólogo Federico Feltes, de Clinicas Dorsia, señala que el melasma y lentigo solar son las principales preocupaciones que se observan en el post-verano.

Los tipos de manchas existentes y las causas que las provocan son múltiples, sin embargo, esas dos son las más frecuentes y las que suelen "generar un problema estético mayor para el paciente", explica el médico.

 Afectan en la zona de la frente, periocular, pómulos y labio superior. El sol, el embarazo, los anticonceptivos y los tratamientos hormonales empeoran su apariencia.

Los lentigos solares se producen, detalla el médico, por el daño provocado por la luz ultravioleta.

 Para protegerse, la piel aumenta la producción de melanina de manera localizada en forma de manchas, que solemos asociar con el paso del tiempo porque suelen aparecer pasados los 30 años y no desaparecen pasado el verano, sino que permanecen a modo de recordatorio del exceso de sol.

Son muy frecuentes en las personas de piel clara y que se queman fácilmente, es decir, fototipos I y II.

Sin embargo, el Doctor Feltes asegura que "las manchas se desvanecen a través del tratamiento adecuado, aunque nunca damos un resultado por definitivo, ya que pueden reaparecer".

Un tratamiento en tres fases que incluye una protección con un filtro solar adecuado y evitar al máximo el sol directo, además del uso de despigmentantes. Feltes señala que entre los más comunes están la hidroquinona y los ácidos kójico, azelaico y tranexámico, así como la vitamina C y los derivados de la vitamina A, conocidos como retinoides.

Y, por último, el láser, si se precisa celeridad en los resultados o "en los casos más rebeldes". El dermatólogo añade que "la combinación de despigmentantes y láser es el tratamiento más eficaz posible" para eliminarlas o aclararlas.

 La doctora María Rosa García Maroto, directora médica de Clinique La Prairie de Madrid, incide en el uso del láser como método eficaz para eliminar las manchas, pero no todos, ya que algunos provocan lesiones en el tejido colindante, por lo que recomienda el cambio de cabezales en el láser Xeo, para adaptar el tratamiento a cada tipo de mancha. "No se pueden abordar todas igual".

"Las manchas son un tema complejo, hay millones de factores que influyen en la posibilidad (o no) de revertirlas", advierte Raquel González, directora técnica de Perricone MD, que incluye además de su sobrexposición al sol, el estrés y la alimentación.

María José Tous, farmaceútica y fundadora de Kosei, recomienda, para eliminar las manchas oscuras de la piel un concentrado a base de ácidos y sustancias despigmentantes que ayuda a tratarlas manchas y pigmentaciones irregulares de la piel.

Opciones todas ellas que deben ir acompañadas de una visita a un profesional de la medicina.

EFE