Aprende a organizar tu escritorio ergonómicamente y trabaja feliz

Cuántas veces nos ha resultado incómodo tener los pies colgando en el asiento mientras estamos sentadas en la oficina, o tener el monitor muy por debajo de la vista, obligándonos a encorbar nuestro cuello y columna. De repente pasas muchas horas en el trabajo o estudiando frente a la computadora y hayas normalizado ciertos elementos como por ejemplo la posición del teléfono, el teclado de la computadora o la altura de la silla donde pasas largas horas tipeando.

Existen muchos motivos como los dolores de columna, estrés y dificultad para visualizar ciertos elementos por los que podrías empezar de una vez a organizar tu escritorio de manera ergonómica, verás que te sentirás mejor contigo misma y con tu salud.

La ergonomía es la disciplina responsable del diseño de diversos lugares de trabajo y busca encajar o coincidir las diferentes características anatómicas, fisiológicas, psicológicas y las capacidades de los trabajadores que las utilizan, por lo cual optimiza los tres elementos: humano-máquina-ambiente necesarios para el bienestar elaborando métodos de técnica, organización y de la persona. 

Marie Kondo especialista y amante de tenerlo todo en su lugar hace alusión reiteradas veces a la importancia de organizar nuestra ropa, libros o kits de cocina, por lo que a partir del orden, asegura, encontraremos la felicidad. De la misma manera sucede con aquello que utilizamos diariamente y por varias horas durante las actividades de trabajo, por eso en la siguiente nota te enseñamos cómo organizar tu escritorio de manera ergonómica según los consejos del especialista en ergonomía, Jon Cinkay.

La idea de todos estos consejos es poder reducir los malestares corporales y obtener una buena postura. Empieza por sentarte en tu sillón como todos los días y ajústala de modo que tus pies no queden en el aire de ninguna manera, de ser así puedes colocar un soporte en el piso para alcanzar y lograr una mejor postura. Por otro lado, la altura del asiento debe permitirte mantener los brazos flexionados en un ángulo de 90 grados y la espalda recta.

Súmamente importante, la parte superior de este aparato debe estar a la altura de nuestros ojos y a una distancia apropiada, para que sepas cuán lejos debe estar el monitor de tu vista puedes sentarte como si fueras a trabajar, estirar el brazo y corroborar, si logras tocar la pantalla significará que la distancia es la correcta, de lo contrario no dudes en apartarla un poco más.

De ser el caso, en el que debes utilizar dos monitores para trabajar recuerda colocarte justo en el medio de ambos.

Aunque parezca que siempre están en el lugar correcto, procura darle la importancia respectiva  a estos elementos, ya que son los que más utilizamos con nuestros brazos y su mala posición podría ocasionarte dolores de cuello. Lo ideal es tenerlos periféricamente cerca, sin tener la necesidad de mover nuestros hombros para poder alcanzarlos.

Recuerda que si trabajas prolongadas horas en tu escritorio, debes procurar levantarte al menos dos minutos por cada hora de trabajo, ya que estar sentada por mucho tiempo dificulta la circulación en la sangre pudiendo atrofiar tus articulaciones y músculos. También podrías practicar movimientos o estiramientos de cuello en prácticos y sencillos ejercicios como parte de tu rutina diaria. ¡Así reducirás las tensiones!