Luis Agustín Farfán, padre de Jefferson, rompe su silencio y explica la PODEROSA razón de NO BRINDAR entrevistas

Luis Agustín Farfán, padre de Jefferson Farfán, rompe su silencio y explica la PODEROSA razón de NO BRINDAR entrevistas. El padre del talentoso exfutbolista ha sido una figura conocida para muchos fanáticos y seguidores del deporte peruano. Durante años, ha evitado aparecer en los medios y se ha mantenido alejado de los reflectores, lo que siempre ha despertado curiosidad.

En 2020, Luis Agustín Farfán concedió una entrevista exclusiva al programa 'TeleDeportes', emitido por Panamericana TV. Durante la entrevista, el padre de la 'Foquita' explicó la importante razón por la que se mantuvo alejado de las entrevistas televisivas y la exposición mediática.

"Yo fui un padre ausente para Jefferson y ahora que él está jugando la gente puede pensar que yo quiero estar detrás de él. Por eso trato de no salir mucho a hablar…Siempre he trabajado por mí mismo…No me he valido de él", dijo en un inicio Luis Farfán.

“Tenemos una relación normal, bien. Nos juntamos y conversamos. No hay nada malo (una relación mala), como piensa la gente. Nosotros nos juntamos y hablamos normal, sino que la gente es mala e interpreta mal, de repente porque yo vivo en otro sitio y piensan que yo nunca voy a saludarlo. Yo no le puedo estar contando a todo el mundo lo que converso con Jefferson. Yo converso en privado con él y ahí queda todo”, concluyó.

Jefferson Farfán fue el invitado más reciente en el podcast de 'Cuto' Guadalupe. Durante su charla con su tío, el conocido '10 de la calle', Farfán rememoró el momento en que conoció a su padre. "Era chiquito, recuerdo que lo vi cuando visité a mi abuela", compartió al inicio de la conversación.

Después, la 'Foquita' reveló cómo es su relación actual con su progenitor: "Mi papá conmigo, siempre que nos hemos visto, es una relación amical. Siempre lo molesto, pero la comunicación con él es de amigos".

"Mi papá sabe que no ha estado conmigo, pero mi mamá nunca inculcó que lo juzgue. No soy nadie para juzgarlo. El que juzga es el de arriba. Mantenemos un respeto, cuando veo lo saludo, pero siempre sale la chacota, lo molesto y le digo: “Por qué no me diste mi tarro de leche, ahorita estarías en mi mansión", fueron las palabras de Farfán.