Reina Letizia roba la atención en Seúl con sorprendente look romántico
Únete al canal de Whatsapp de WapaTras pasar dos días en Japón para asistir a la entronización del emperador Nahurito, los reyes de España, Felipe VI y doña Letizia, llegaron el pasado miércoles a Seúl para iniciar su primera visita de Estado a Corea del Sur, con una agenda que incluye diversos actos de carácter institucional, económico y comercial.
En la ceremonia de entronización y la cena de gala de los emperadores nipones, la reina lució sofisticados y elegantes outfits que colmó con algunas de las joyas más importantes de la corona.
La reina ha mantenido el listón alto y ha apostado por un look romántico para asistir a la cena oficial ofrecida por Moon Jae-In y su esposa, Kim Jung-Suk.
Doña Letizia estrenó un vestido midi de estilo romántico con flores y transparencias, un diseño de Temperley London, firma favorita de Kate Middleton.
Se trata de un diseño muy femenino rosa empolvado con cuello redondo, mangas "puggy", volante en la falda y cuerpo entallado con bordados botánicos y figuras geométricos en tonos fucsias, blancos y negro, una pieza que ha combinado con unos "stilettos" transparente y negros del zapatero canario Manolo Blahnik.
Como complementos lució unos fabulosos pendientes de diamantes y rubíes, que pertenecen a la reina Sofía, con forma de pájaro que ya usó durante su visita en Japón en 2017 y una pulsera también de brillantes y rubíes.
Doña Letizia optó por recogerse el cabello en un moño bajo con algunos mechones sueltos que le otorgaban un aire casual y romántico.
A su llegada a Seúl, cuando se bajó del avión utilizó un vestido blanco de talle recto con una chaqueta negra sobre los hombros, un estilismo que completaba con salones y cartera de mano negra, mientras que don Felipe se decantó por traje oscuro, camisa y corbata azul.
Horas más tarde, para la ceremonia de bienvenida en los jardines del palacio la Casa Azul, doña Letizia se decantó por un vestido verde botella con estampado de flores azules y pendientes de diamantes y zafiros. EFE