Los proyectiles encontrados en el cuerpo de Jack Brayan Pintado Sánchez, uno de los dos asesinados en la segunda marcha nacional del día de ayer, eran de plomo y no de goma, tal y como lo había mencionado la Policía Nacional del Perú, según el abogado de la familia del joven de 22 años.
En total, la víctima habría recibido al menos diez impactos durante las manifestaciones provocadas tras el golpe de Estado a Martín Vizcarra. Su hermano calificó el acto como homicidio y culpó a los miembros de la PNP.
TE PUEDE INTERESAR: Florez-Araoz tras muertes: "La gente es la que se expone al ponerse en situaciones límite”
“Dos (proyectiles) en el cráneo, en la cara, en el cuello y en el brazo. Han hecho bien en no permitir la presencia del personal policial, porque aquí no tienen nada que hacer. Esto es un tema del Ministerio Público. Esto es un homicidio calificado, pero esto lo verificaremos. Haremos valer los derechos de los familiares de la víctima”, mencionó en diálogo con RPP.
Asimismo, denunció una presunta obstrucción en las pruebas criminalística, debido a que personal de la PNP intentó ingresar a la Morgue Central hasta en tres ocasiones, pese a que se encontraba prohibido su ingreso.
A esta denuncia se le suma la mencionada por los parientes de Inti Sotelo Camargo, el otro joven desaparecido. Según señalaron, los agentes se apersonaron hasta su vivienda para intentar intimidarlos.
“La Policía ha ido a la casa de los señores, no sabemos para qué. Es una situación que está ocurriendo en varias situaciones con otros casos. [...] Hay una persona muerta, los familiares están pasando por una situación muy grave y tienen que soportar la presión de la Policía”, comentó el abogado en diálogo con América TV.