El cuy es una especie oriunda de nuestro país y es considerada Patrimonio Natural de la Nación por sus propiedades nutricionales para combatir la anemia y la desnutrición en diversas regiones.
La carne de cuy es reconocida desde tiempos ancestrales como un superalimento de excelente sabor e infaltable en las festividades regionales. Asimismo, es un alimento saludable de alto nivel proteico, bajo en grasa, colesterol de buena calidad, minerales y vitaminas.
Cada segundo viernes de octubre se conmemora el Día Nacional del Cuy, así que te contamos cuáles son las bondades nutricionales de este alimento andino del cual el Perú es el principal productor a escala mundial.
La carne de cuy tiene un alto valor biológico, debido a que contiene los aminoácidos y ácidos grasos esenciales requeridos en la nutrición humana.
Según el Centro Nacional de Alimentación y Nutrición del Instituto Nacional de Salud (INS) del Ministerio de Salud (Minsa), la carne de cuy contiene 20.3 % de proteína; 1.6 % de grasa; 1.2 % de minerales y 0.1 % de carbohidratos totales y disponibles. Estos valores superan a los que registran la carne de ave, vacuno y ovino.
Entre los minerales identificados en la carne de cuy destacan el calcio (29 miligramos), fósforo (29 mg), zinc (1.57 mg) y hierro (1.9 mg). Además, posee vitaminas como la Tiamina (0.06 mg), Riboflavina (0.14 mg) y la Niacina (6.50 mg); mientras que su aporte de energía alcanza las 96 kilocalorías (Kcal).
El contenido promedio de proteína en la carne de cuy (20.3 %) es superior al de la carne de ave (18.3 %), vacuno (17.5 %), ovino (16.4 %) y porcino (14.1%), por lo que su consumo constituye un aliado clave en la lucha contra la anemia y la desnutrición.
La carne de cuy tiene alta digestibilidad, baja concentración de colesterol y triglicéridos, alta presencia de ácidos grasos linoleico y linolenico, esenciales para el ser humano.
La existencia de estos ácidos grasos es muy baja o casi inexistentes en otras carnes, y estos son precursores de la conformación del ácido graso araquidónico (AA) y ácido graso docosahexaenoico (DHA). Ambas sustancias son vitales para el desarrollo de las neuronas y las membranas celulares.
La versatilidad de la carne de cuy en las comidas peruanas desafía a la imaginación y, en la actualidad, existen diversos potajes que tienen a este insumo proteico como protagonista.
Cabe recordar que, entre los platos emblemáticos preparados con carne de cuy figuran: el cuy chactado, el adobo de cuy, el picante de cuy, el enrollado de cuy, consomé de cuy, el piscuy, el cuy a la caja china y al cilindro, el cuy al palo, así como el innovador chijau cuy, que representa la fusión de la gastronomía andina y china.