Sin importar quien fue primero, el huevo y la gallina podrían salvarnos del nuevo coronavirus. El bioquímico Mirko Zimic, y su equipo de científicos, trabajan arduamente para encontrar una vacuna que acabe con el COVID-19 en nuestro país.
Pero como esta investigación durará unos meses más, a la par vienen realizando una terapia para tratar casos positivos de coronavirus con las gallinas y sus huevos.
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Zimic explica que este tratamiento busca administrar anticuerpos a los pacientes para ayudarlos a protegerse contra el COVID-19 y hasta vencer a la enfermedad. Pero, el problema de los humanos es que logran reproducir muy pocos anticuerpos.
Por lo que este grupo de científicos peruanos ha ideado un plan en que consiste usar a las gallinas ponedoras de huevos y cosechar los anticuerpos en las yemas, para lograr más efectividad.
“Dado que tenemos los antígenos de los virus producidos, la idea es vacunar a las gallinas para que los anticuerpos que se generan en su sangre, pasen también a los huevos. Y luego, estrictamente la yema, pueda ser procesada para que sea suministrada a los pacientes”, informa Zimic.
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Zimic, quien es coordinador bioinformático del laboratorio peruano Farvet, es consciente que su propuesta todavía no ha sido probada en humanos con COVID-19, pero hay muchos trabajos previos en donde se han suministrado anticuerpos a humanos con resultados importantes y exitosos.
“De modo que tenemos la esperanza que así sea. De hecho, ya logramos inmunizar a la primera gallina, la cual la bautizamos como ‘Esperanza’, con el antígeno RBD y se espera que en 21 días, esta gallina alcance los niveles de anticuerpos óptimos para poder ser cosechados a partir de sus huevos y poder hacer ensayos en cerdos primero”.
De tener éxito, se plantea suministrar la yema cruda o deshidratada y liofilizada con el anticuerpo IgY modificado. Esto podría ser suministrados por vía nasogástrica, como un aerosol intranasal o tal vez el mismo anticuerpo purificado puede ser administrado con una inyección subcutánea.