El pavo es el protagonista de la cena navideña y en Perú, millones de familias se reúnen para comerlo y disfrutarlo en Navidad. Aquí su historia.
Únete al canal de Whatsapp de WapaLa tradición de comer pavo en Navidad tiene profundas raíces históricas que se remontan a diversas culturas y a medida que nos acercamos a la Nochebuena, miles de familias se alistan para organizar la mejor cena navideña y así pasar un agradable momento en familia. Con más de uno queriendo comprar el mejor pavo, los supermercados experimentan un incremento de sus actividades, con personas buscando los ingredientes esenciales para este plato.
Este suculento platillo ha ganado una gran popularidad en Perú y en diversos países de Latinoamérica, por lo que es prácticamente impensable pensar en una celebración navideña sin su presencia. Pero, ¿alguna vez te has preguntado por qué comemos pavo en Navidad? A continuación, conozcamos el origen de esta particular tradición.
Una versión dice que el consumo del pavo nació en la época azteca, donde esta ave desempeñaba un papel significativo en las festividades. Aunque los aztecas no celebraban la Navidad, sus festividades marcaban el solsticio de invierno, un evento compartido con otras culturas prehispánicas y dónde el pavo era uno de los platos centrales.
Con la llegada de los españoles a México, ellos llevarían esta ave a Europa, luego de que varias tradiciones indígenas fueran reemplazadas por celebraciones cristianas. Uno de los ejemplos más claros es el del Panquetzaliztli, que se cambió por la Navidad. Si bien, no se realizaba una cena, el pavo era el elemento principal del banquete.
MÁS DE WAPA: El TERRIBLE ERROR que podría DESTRUIR tu Navidad si DESCONGELAS mal el pavo y nadie te lo dijo
Otra historia cuenta que el pavo en Navidad nació gracias a los colonos de Massachusetts en el año 1621, fecha donde compartieron este plato con los nativos para celebrar la cosecha de otoño. Esta actividad daría vida al Día de Acción de Gracias.
Con el paso de los años, y los cambios en la economía peruana, el consumo del pavo permitió a las familias dar una cena más contundente, debido al gran tamaño del ave. El tradicionalista peruano Claudio Meneses señala que los jesuitas fueron claves para la difusión de este plato en el Perú.