¿Se te eriza la piel al escuchar música? Estudio revela la verdadera razón

Una de las formas de amenizar el tiempo mientras vamos en el carro o cuando se realiza las tareas del hogar es escuchando música y que muchas veces en los primeros acordes de la canción sientes como se eriza la piel. ¿Te ha pasado? ¿por qué sucede?

Si eres de aquellas personas que, al escuchar una canción favorita o una voz que deja impactado, tu cuerpo se empieza a erizar como “piel de gallina”, déjame decirte que eres muy especial.

Si, así como lo lees. De acuerdo a un estudio científico realizar difundida por la revista científica de Oxford explicar la razón de ese escalofrío que recorre tu cuerpo al reproducir ciertas melodías, pero que no todas las personas lo pueden sentir.

Esta sensación se debe a una respuesta del cuerpo a un estímulo externo que, ahora, los científicos han ligado a una causa: todo se relaciona al hecho de que tu cerebro es especial y hace diferentes conexiones que afectan el modo en que la música es procesada.

Para dar con este resultado, los investigadores de Harvard ordenaron a 20 personas que hicieran una lista de sus canciones preferidas para posteriormente ser exploradas en el experimento.

El resultado que se obtuvo fue que diez personas dijeron haberse erizado, mientras que los otros diez mencionaron no haber sentido algún cambio en su cuerpo mientras escuchaban las canciones, por lo que ingresaron en el grupo de los “no erizados”.

Tras ello, los especialistas realizaron un estudio en relación a los efectos que tenían algunas personas al escuchar música y dedujeron que el cerebro los participantes que experimentaron ese “orgasmo musical” es muy diferente del de los que no lo hicieron.   

En resonancia magnética, se determinó que los que se erizaron con la música tienen más fibras nerviosas que desde el córtex auditivo se conectan con el córtex insular y el córtex prefrontal, responsables del procesamiento de las emociones.

Tras este resultado, el estudio sugiere que la música es un elemento evolutivo para los seres humanos. Es decir que cumple una función para nosotros, incluso si ésta es que sea “estéticamente gratificante” nada más, como consideran los científicos.

“Nuestros resultados fortalecen la primera evidencia de una base neuronal de diferencias de cada individuo en relación con el acceso sensorial al sistema de gratificación, y sugieren que la comunicación socio-emocional a través del canal auditivo puede ofrecer una base evolutiva de la música con la función de ser estéticamente gratificante en los seres humanos”, explica uno de los autores del estudio científico.