¿Los perros podrían vivir si los humanos desaparecen? Esto dice la ciencia

Es vox populi afirmar que el ser humano ha tenido como afán dominar el mundo, a su antojo y paciencia. No le ha importado explotar la flora y la fauna, con tal de saciar los antojos y caprichos.

Sin embargo, al principio, el hombre se dedicó a la agricultura y ganadería, pero no tuvieron en cuenta un detalle: que tenían como enemigo al animal, que causaba terror en las zonas rurales.

Un ejemplo de ello es la península Ibérica, donde reinaba el lobo. Hace aproximadamente 30 mil años inició la domesticación de los animales, que evolucionar a la paralela de los humanos. Los cánidos y el hombre llevaron una relación que les permitió vivir de maneja conjunta.

Hoy por hoy, las mascotas normalmente son dependientes de los humanos, tanto en lo material como en lo emocional. Por ello, es comprensible que cualquier meme o noticia sobre un animalito dé mucho que hablar.

Lo curioso es que siempre llama la atención un mundo, si es que no existieran los humanos y todo dependería de los perros. Cabe destacar que los canes que viven como mascotas son solo el 20 %, mientras que los demás son granjeros, callejeros o salvajes.

Hace unas semanas, se ha visto algunas investigaciones que averigua los lazos biológicos, evolutivos y sociales que tenemos en común con los perros.

En ‘A dog’s Wolrd’, los científicos Jessica Pierce y Marc Bekoff, consideran que ese panorama se puede considerar en un futuro, luego de que los humanos no existan. El primer punto a tomar en cuenta es que no existirá más historia, ya que no habrá mente que lo pueda recordar.

No obstante, los canes sí tendrían ventaja ante las demás especies, ya que han sido los más cercanos al hombre. Por ello, se les complicaría menos el hecho de buscar comida.

Incluso, se tendrían que alimentar de los alimentos despilfarrados que lamentablemente se dan en toneladas. En España se desechan 25,5 millones de kilos de comidas.

"El fin de los recursos alimentarios humanos representaría el desafío de supervivencia más importante para los perros", indicó Jessica Pierce, de la Universidad de Princeton.

Es importante indicar que la desaparición de humos tendría como secuencia también la pérdida de un número de decesos caninos, según la investigadora. Los que tendrían más problemas serían los caseros.

Los canes más pequeños no tendrían tantos problemas para encontrar presas en el medio natural, gracias a su tamaño. "La dieta de cada raza sería una de las influencias más predominantes en su evolución, pudiéndose convertir en especies distintas de perros", agrega Pierce.

El físico y morfología tendrían modificaciones. "La selección natural eliminaría rápidamente los rasgos físicos que son desadaptativos, como los hocicos extremadamente acortados, los pliegues cutáneos excesivos (orejas) o las extremidades demasiado largas o cortas", sostiene.