La pandemia del coronavirus ha golpeado con fuerza a la familia Sandoval, diez de sus miembros ya han fallecido por COVID-19 y, con la llegada de la segunda ola, uno más del clan se encuentra luchando por su vida.
Gabriel Sandoval Millones está internado en la Villa Mongrut del Seguro Social de Salud (EsSalud) y requiere con urgencia una cama en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Tiene una transferencia lista, pero le refieren que no hay ninguna disponible.
“Mi padre es una persona hipertensa y padece de sordera, se encuentra en estado crítico con el cuadro de neumonía COVID-19, tiene el pulmón derecho totalmente afectado y el izquierdo con 2/3 de afectación, se encuentra saturando 85 conectado a un balón de oxígeno y es su segundo día con antibióticos, corticoides y anticoagulantes”, explica preocupada Pamela Sandoval Manrique.
Agrega que en el informe médico que le dieron esta tarde, le precisaron que ya cuenta con una orden de traslado a UCI, incluso que ya se envió la alerta a los diferentes nosocomios; sin embargo, la espera continua hasta el momento.
“No es posible que en esta situación no sea trasladado a una cama UCI de las que hace alusión la ministra de Salud (Pilar Mazzetti) en sus declaraciones. En el hospital nos indican que debe esperar a que se desocupe, no hay interés real por hacer que mi papá se recupere y no podemos abandonarlo a su suerte”, recalca.
Sandoval lamenta las consecuencias fatales que ocasionó el coronavirus en su entorno cercano. “Solo en mi familia tenemos 10 fallecidos por COVID-19 y hemos recibido el mismo trato de indiferencia para todos. Basta ya. Necesitamos las camas UCI que la ministra nos ofrece a todos los peruanos en sus declaraciones”, sostiene.
Agrega que considera “una burla” hacia la confianza que los ciudadanos depositan a sus autoridades. “La información del estado de salud de mi padre llegó después de dos días sin que sepamos nada de él. Cada minuto que pasa sin una cama UCI atenta contra su vida”, finaliza.
*Con información de La República.