A partir de los 6 o 7 meses tu bebé deja de levantarte y comienza a dormir durante toda la noche, sin embargo existen casos donde los pequeños no pueden hacerlo debido a diversos factores que interrumpen su sueño.
Por ello te contamos 5 razones y cómo las puedes afrontar para que ambos descansen placenteramente.
En ocasiones los bebés sienten temor cuando no ven a sus papás por lo que se empiezan a angustiar, por ello cuando empiece a llorar debes atenderlo. Te aconsejamos que antes de dormir te tomes unos minutos para jugar con él, eso lo mantendrá más tranquilo.
Algunos bebés se quedan dormidos rápidamente, sin embargo a otros les cuesta por lo qué se levantan en medio de la noche y no pueden volver a conciliar el sueño, cuándo ocurra esto tómalo en tus brazos y arrúllalo hasta que se duerma, con el tiempo evitará levantarse.
Esto ocurre cuando el bebé no está del todo cansado, si este es tu caso te recomendamos llevarlo a pasear por unos minutos, esto hará que se relaje. En caso de que este no ayude debes revisar su horario de sueño, puede que se esté levantando tarde y acostándose tarde.
Cuando el bebé comienza hablar suele pedir cosas en vez de dormir, si es el caso de tu bebé, antes de llevarlo a sus cuna cubre todas sus necesidades. Si observas que esto continua habla con él y ten paciencia los cambios no se dan de un día a otro.
Suele suceder que los bebés prefieren dormir en cualquier otra parte que no sea su cuna, este mal hábito se corrige enseñándole al niño que su cuna es donde debe dormir.