La moda también es una forma de expresión y, en esa línea, cada vez más personajes la emplean para enviar fuertes mensajes que rompan con los estereotipos que encasillan a las personas a usar prendas femeninas o masculinas según sea su género.
Si recientemente Harry Styles generó revuelo al protagonizar la portada de Vogue de la edición de diciembre - por primera vez un hombre lo hacía en solitario-, esta vez el actor mexicano Alejandro Speitzer -pareja de la española Ester Expósito- hizo lo propio empleando joyería Bulgari y vestidos para la portada de la revista Badhombre.
“Las etiquetas limitan nuestras decisiones y desarrollo personal y colectivo”, escribió desde su cuenta de Instagram el actor se ha posicionado en el cine y el mundo de las series de la mano de grandes empresas como Netflix.
En una de las imágenes de portada podemos ver al actor con un vestido rosa de mangas acero con polka dots negros XL, unos guantes de terciopelo y joyería dorada de la firma francesa Bulgari. Elementos que tienen una gran connotación femenina, pero justamente han sido empleados para invitar a la reflexión.
“¿Por qué un hombre heterosexual cisgénero puede usar vestido y ser celebrado, y otras personas son asesinadas en las calles por lo mismo? ¿Por qué la ropa debería definir identidad de género de alguien, y no solo ser una herramienta más de expresión? ¿Por qué los hombres no podemos estar en contacto con nuestros sentimientos sin que se nos juzgue?”, indicaron desde la cuenta de Instagram de la revista Badhombre.
Asimismo, para un segundo outfit que utilizó podemos una combinación muy simbólica en el que se mimetizan elementos que tradicionalmente han sido considerado femeninos y masculinos. En este caso una camisa y un vestido. La prenda que empleó llevaba el cuello y las mangas largas de una camisa blanca anexado a un mini vestido rosa que tenía bordados en la parte inferior.
En el cine hemos visto a Diane Keaton en Annie Hall fue una de las precursoras de la moda andrógina al introducir prendas masculinas como trajes, sacos y sombreros en sus outfits. Y hoy en día muchas más mujeres apuestan por incluir prendas consideradas “masculinas”; sin embargo, no sucede lo mismo si lo aplicamos a la inversa.
Al respecto, Juan Avellaneda, diseñador de moda para hombres, quien ha visto cómo sus trajes conquistan también el armario femenino, comentó lo siguiente para Vogue: "la mujer ha evolucionado mucho pero el hombre no tanto. Hay siluetas que el hombre no va a aceptar. Pero, aunque diseñadores como yo vistan a mujeres con trajes, hay ajustes para que la prenda se feminice; el concepto es maravilloso, pero aún queda mucho camino por recorrer. Nos empeñamos en que no haya sexo en la moda, yo uso camisas o bolsos de mujer, sí, pero siendo sinceros con nosotros mismos los vestidos no se venden a los hombres".