Joshua dio datos inéditos sobre su amor fugaz con la abogada Génesis Tapia.
Únete al canal de Whatsapp de Wapa
En la más reciente edición de Magaly TV La Firme, Magaly Medina tuvo como invitado a Joshua Franco, un empresario de 30 años, quien decidió hablar sin filtros sobre la relación que mantuvo con Génesis Tapia. Durante la conversación en vivo, el joven empresario reveló detalles de las salidas que compartieron, dejando claro que, aunque su romance duró poco más de un mes, siempre fue público y nunca se ocultó.
Franco explicó que su relación con la bailarina no se vivió en secreto, pues todas sus citas fueron en lugares abiertos. “No me considero un amante. Nunca he sido el escondido ni el clandestino”, afirmó, rechazando las etiquetas que circularon en medio de la polémica.
Uno de los aspectos que más sorprendió de su testimonio fue el elevado costo de sus encuentros. Según reveló, Tapia prefería restaurantes exclusivos y bebidas de lujo, como un champagne Dom Perignon valorizado en 3.500 soles. “En un mes visitamos cinco restaurantes y cada salida podía superar los 4.500 soles. En total, llegué a gastar unos 20 mil soles”, señaló, confesando que el gasto afectó directamente su tarjeta de crédito.
Más allá de lo económico, Franco reconoció que su mayor equivocación fue confiar ciegamente en las palabras de Génesis, quien le aseguró que ya estaba separada de Kike Márquez. “Confié en lo que me dijo, no lo verifiqué, y ahí estuvo mi error”, admitió con arrepentimiento.
El empresario también describió a Tapia como alguien celosa y posesiva, llegando a exigirle que compartiera su ubicación en tiempo real. “Me pedía pruebas de dónde estaba y hasta fue a mi oficina para marcar territorio”, recordó. Aunque en un inicio le pareció una muestra de interés, con el tiempo se dio cuenta de que esa intensidad desgastó la relación.
Por otro lado, Franco aseguró que su vínculo con Génesis habría motivado a Kike Márquez a reconquistarla. “Parece que mi papel fue el de salvar un matrimonio”, comentó entre ironía y resignación.
Finalmente, Joshua Franco reflexionó sobre lo vivido y las lecciones que le dejó esa experiencia: “La dignidad no se negocia con carteras ni con viajes. No se puede perder la paz emocional solo por aparentar”.