ONU advierte que mujeres embarazadas en Ucrania están teniendo partos en condiciones infrahumanas
Únete al canal de Whatsapp de WapaLamentable. La guerra desatada desde que Rusia comenzó a atacar Ucrania no tiene fecha de cesar de forma inminente y miles de personas siguen su huida de las bombas hacia lugares más seguros.
Por su parte, las Naciones Unidas ha calculado que ya son 660.000 las personas que se han visto obligadas a abandonar el país hacia estados fronterizos como Polonia, Hungría, Eslovaquia o Moldavia.
La gran mayoría de personas que buscan refugio son mujeres y niños, ya que los hombres deben quedarse en Ucrania. Pero lo más impactante son las imágenes de mujeres con mochilas y niños en brazos caminando bajo la nieve, o intentando subirse a abarrotados trenes.
Muchos de ellos sucumbiendo al cansancio recostadas en estaciones están conmocionando al mundo.
Gestantes en peligro
Las mujeres, una vez más, vuelven a ser un colectivo vulnerable, expuesto a las consecuencias de un conflicto de imprevisible futuro.
El medio internacional 'Público' logró localizar a un trabajador del organismo de las Naciones Unidas encargado de la salud sexual y reproductiva a punto de ser evacuado a Moldavia.
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Ese hombre explicó que su prioridad ahora es intentar que las mujeres ucranianas puedan dar a luz de manera segura y que vivan libres de violencia y abusos.
Se trata de Jaime Nadal, trabajador español del UNFPA, el organismo de las Naciones Unidas encargado de la salud sexual y reproductiva, que permanece en Kiev, epicentro de la guerra, a la espera de ser evacuado de un momento a otro hacia Moldavia.
Labor de UNFPA
El UNFPA trabaja alrededor de todo el mundo apoyando la salud reproductiva de mujeres y jóvenes, el acceso fiable a anticonceptivos modernos, la prevención de la violencia de género, el abandono de la práctica de la mutilación genital femenina.
También se dedica a la prevención de los embarazos en adolescentes, el suministro de productos para partos seguros y la lucha para poner fin a los matrimonios infantiles. El equipo de UNFPA cuenta ya en Ucrania con un equipo de 45 personas ubicadas sobre todo en el oeste del país
Actualmente, están centrando sus esfuerzos en la guerra provocada por Rusia contra Ucrania y Nadal forma parte del equipo que se encuentra allí, preparado para comenzar su labor humanitaria.
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"Hay todo un mecanismo de emergencia que se está preparando por parte de la Unión Europea junto a Echo (la Agencia Europea de coordinación de asistencia humanitaria) con una cierta capacidad logística por parte de la ONU para que en el momento en el que las condiciones lo permitan poder empezar con la asistencia humanitaria, entrando por el oeste de Ucrania, en las zonas fronterizas con Polonia, Hungría y Eslovaquia y por el sur, con la frontera con Moldavia", explica.
El equipo de UNFPA cuenta ya en Ucrania con un equipo de 45 personas ubicadas sobre todo en el oeste del país, que cuentan con el apoyo de la oficina regional y la oficina que tienen en Copenhague para todo lo relacionado con compra de materiales, adquisiciones y logística.
Nadal explica que el organismo para el que trabaja "se va a centrar principalmente en dos cuestiones: una es la atención cualificada al parto y el otro es la violencia sexual y la violencia basada en género, que en ocasiones es utilizada con un arma de guerra".
Cifras que impactan
Un colectivo que pasa completamente inadvertido en una guerra es el de las mujeres en estado de gestación y esto se ve reflejado ante la terrible situación por el enfrentamiento de ambos países.
En Ucrania en cualquier momento del año se cuenta con unas 330.000 mujeres embarazadas y se estima que 80.000 mujeres darán a luz en los próximos tres meses en el país, muchas de ellas sin acceso a atención de salud materna crítica.
Esto supondrá que el parto será una amenaza para la vida en lugar de una experiencia que cambie la vida.
"Nuestro trabajo es garantizar que en este tipo de circunstancias tengan acceso a servicios adecuados y lo que estamos viendo es que están teniendo partos en condiciones infrahumanas, sin ningún tipo de acompañamiento cualificado ni médico ni condiciones de salubridad mínimas en estaciones de metro, en sótanos de edificios o en refugios habilitados", lamenta Nadal.
Asimismo, relató que el sábado por la noche, por ejemplo, cerca de cien mujeres dieron a luz en sótanos y estaciones de metro en Kiev y señala que esto se debe a que el acceso a todos estos servicios es mínimo, y no porque no haya infraestructuras habilitadas, sino porque es imposible ahora mismo desplazarse con seguridad a ningún hospital.
Además, Nadal recalca que "los abortos espontáneos aumentan en situaciones de estrés como el que están viviendo las mujeres ahora mismo en Ucrania". "Normalmente en los conflictos se contabilizan las víctimas humanas provocadas por ataques, pero pocas veces se cuentan las personas que pierden la vida en otras circunstancias, como estas mujeres embarazadas, de una manera completamente absurda e innecesaria por culpa de la guerra", precisó.