El alza de contagios por COVID-19 sigue afectando a todos los peruanos, ello tras el rápido avance de la enfermedad por la nueva variante del coronavirus.
Ómicron representa el 90% de contagios en Lima, mientras que en provincia se detectó que de todos los casos confirmados el 70% corresponde a dicha variante. A la fecha, ya son 18 regiones que han superado su pico más alto registrado en la segunda ola.
El jefe de la Unidad de Inteligencia y Análisis de Datos de EsSalud, Dante Cersso, advirtió que lado provincias dentro de la la lista de alza de contagios son Áncash, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Cusco, Huánuco, Ica, Junín, Lima, La Libertad, Lambayeque, Moquegua, Pasco, Piura, Puno, San Martín, Tacna y Huancavelica.
Del total, hay cinco regiones donde los contagios aumentaron en más de 300% entre las primeras semanas de enero. La región más afectada en este aumento exorbitante de contagios es Loreto, donde las cifras subieron en más de 800%.
Asimismo, otra provincia afectada es Puno con 400%, mientras que Huancavelica, Apurímac y Ayacucho en más de 300%.
En caso de Huánuco, en octubre registraba solo 50 contagios semanales, los cuales subieron ligeramente en diciembre con 150 casos detectados.
Actualmente, frente a la tercera ola, los casos se triplicaron en enero hasta más de 700. No obstante, en la última semana la cifra se triplicó a más de 2,600 casos confirmados.
Arequipa también tuvo un aumento considerable en los casos confirmados, ello al contar en noviembre y diciembre con 250 y 600 casos, respectivamente. Tras el anuncio de la tercera ola, se registraron más de 13 mil contagios a la semana.
A pesar del aumento de contagios en el Perú, las cifras de fallecidos por la enfermedad se mantienen muy por debajo de la segunda ola. Cifras actuales demuestran que los infectados se triplicaron con respecto al segundo avance del virus, donde el máximo fue de 60 mil casos y cuatro mil fallecidos semanales.
“(Afortunadamente) no estamos ante una subida exponencial de los fallecidos gracias al efecto protector que ofrece la vacuna”, resaltó Dante Cersso.
El nivel de decesos se mantiene muy inferior en comparación con los casos confirmados; sin embargo, el jefe de la Unidad de Inteligencia y Análisis de Datos señala que las muertes subieron de 300 a más de 400 a la semana en enero.
“Esto puede seguir aumentando si no cambia el comportamiento de las personas, si continúa habiendo fiestas, no se respeta el distanciamiento, el uso inadecuado de las mascarillas”.
NO TE LO PIERDAS: COVID-19: ciudadanos sufren por escasez de medicamentos genéricos en pleno aumento de contagios
El director de vigilancia de Salud Pública del Centro Nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud (Minsa), César Munayco, señaló que se ha reportado defunciones en menores de seis años debido a la enfermedad.
Como se recuerda, los niños de 5 a 11 años aún no cuentan con la vacuna contra la COVID-19 al significar una dosis distinta a la que se aplica en adultos. El primer lote de dosis está destinado a llegar el 21 de enero del presente año.
Al respecto, el especialista recordó que es muy importante la vacunación en menores de edad. “Es una enfermedad que se presenta como un cuadro gripal. Muchos niños, inclusive adultos o adultos mayores, pueden complicarse producto de esta nueva variante (ómicron)”, señaló.
La vacunación permitiría que los niños se encuentren protegidos ante la enfermedad y no desarrollen casos graves como se vienen registrando en la tercera ola. En el caso del hospital del Niño de San Borja, quince pequeños están en hospitalización y tres en UCI.
Con respecto al total de niños en UCI, dos se encuentran en la Unidad de Cuidados Intensivos al presentar comorbilidades.
Asimismo, se reportó el fallecimiento de un menor que tenía patologías como tuberculosis y desnutrición crónica. Al respecto, la pediatra intensivista de UCI de este hospital, Melissa Cóndor Figueroa, menciona que si bien el 70% de niños va a ser asintomático o tener síntomas leves.
“La idea no es alarmar sino informar que lo importante es que los niños se vacunen para evitar continuar propagando el virus y que apenas salga esta nueva programación de vacunación de niños de 5 a 11 años puedan inmunizarse también”, advirtió.
Es importante mencionar que, los niños que se recuperan del COVID-19 tienen hasta 2.6 veces más probabilidades de desarrollar diabetes tipo 1 o tipo 2, ello según un estudio del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
No obstante, la especialista señaló que aún faltan más estudios y data para precisar que sea un hecho certero en la población pediátrica. Cóndor Figueroa fue enfática al mencionar que los casos severos o moderados pueden requerir controles posteriores.
“Los casos severos o moderados y dependiendo de la presentación clínica, si es un caso de neumonía por ejemplo, probablemente sí se requiera tener controles posteriores por neumología”, mencionó.
Con respecto a los síntomas leves que pueden ser tratados en casa, la pediatra señala que la fiebre, tos, dolor abdominal, rinorrea pueden ser controlados en el hogar siguiendo las indicaciones del especialista.
“no es necesario ir a emergencia. Pero si hay signos de alarma como dificultad para respirar, frecuencia respiratoria elevada, diarrea o deshidratación, vómitos o si la fiebre es persistente por más de tres días, se tiene que acudir a la emergencia”, dice Melissa Cóndor.
Es importante mencionar que, durante las primeras semanas de enero se reportó un aumento del 150% de contagios por COVID-19 en niños menores de cinco años. Mientras que el grupo con más variación al alza son los jóvenes de 20 a 24 años con 400%.