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25 Mar 2019 | 16:27 h

¿Cómo saber si tengo el pie plano? Estos son los signos que lo alertan

El pie plano podría presentar dificultades para hacer ejercicio.

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    Cabe aclarar que esto no es un problema grave; sin embargo, es importante conocerlos para iniciar una terapia adecuada, ya que de lo contrario podría presentar dificultades para hacer ejercicio físico, caminar u otras actividades.

    Ante ello, Raquel Tapia Egoavil, jefa del Departamento de Amputados, Quemados y Trastornos Postulares del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), mencionar que el problema físico está muchas veces asociado a lo que se conoce como “hiperlaxitud articular”.

    “El pie plano está asociado a la flexibilidad de los ligamentos, de los tendones, lo cual facilita un descenso, un aplastamiento de todas las estructuras del pie. Así, la planta del pie ya no tiene el arco fisiológico adecuado y hace un apoyo completo, total, en el suelo”, explica la experta.

    Asimismo, estudios internacionales indican que alrededor del 20% de la población tiene pie plano y lo manifiesta de diversas maneras: molestias y cansancio al caminar, dolor en los tobillos o planta del pie. Otro síntoma de alerta es el desgaste notorio del lado interno del zapato.

    “Hay un factor genético asociado a este problema. Así, hay familias que tienden a ser hiperlaxas. Felizmente, en la mayoría de personas esto es un problema pasajero, que se resuelve a medida que el niño crece. Por lo general, en la adolescencia o adultez la hiperlaxitud ha desaparecido, persistiendo solo en casos severos”.

    Ante este problema del pie plano, la especialista sostiene que si el caso es leve o moderado se recomienda el uso de plantillas ortopédicas a fin de mejorar el apoyo de la planta del pie.

    “Es importante entender que la mecánica de todo el esqueleto se altera cuando el pie no tiene un apoyo adecuado. Muchos niños tienden a presentar un poco de jorobita o inclinación de la espalda hacia adelante, al que denominamos cifosis”, explica.

    En tanto, al mejorar la pisada, con apoyo de las plantillas, las molestias asociadas al pie plano disminuyen. “A partir de los tres años ya debería estar formándose el arco, pero de no ser así, podría consultarse con un especialista para determinar si se requieren plantillas. Estas ayudan a disminuir las molestias mientras esperamos que el problema se resuelva de manera progresiva, mientras el niño crece”.

    ¿Cuándo usar las plantillas?

    Las plantillas pueden usarse durante la jornada escolar. Son ideales para los momentos en que los niños y niñas hacen deporte o caminan mucho. No olvidar que estas se cambian a medida que crece el pie y se cambia la talla del calzado.

    La doctora indicó que existen también pie plano congénito y pie plano rígido, que no se resuelven con plantillas y pueden requerir una intervención quirúrgica.

    Este tipo de pie plano no se corrige completamente, no es muy común, pero existe. Los niños y adultos con pie plano rígido reportan más problemas: dolor de espalda, dolor lumbar, dolor en la misma pierna o pie.