El Gobierno de Estados Unidos sigue adelante con su estrategia de deportaciones a gran escala y ha cancelado numerosos procesos migratorios que se encontraban en curso.
Únete al canal de Whatsapp de Wapa
El Gobierno de Estados Unidos ha confirmado la cancelación de varios permisos de trabajo otorgados a inmigrantes de ciertas nacionalidades. Esta decisión, anunciada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), implica que los afectados deberán abandonar el territorio estadounidense.
La administración estadounidense ha retomado una política de deportaciones masivas, una de las promesas más frecuentes durante la campaña de Donald Trump. Ahora no solo serán removidos del país aquellos que se encuentren en situación irregular, sino también quienes hayan recibido la revocación oficial de sus permisos legales, como los nacidos en Afganistán.
LEE MÁS: El Lamborghini del papa Francisco no terminó en un garaje: Santo Padre le dio lucrativo destino
Se ha dado por terminado el programa de Estatus de Protección Temporal (TPS), que ofrecía protección y autorización de empleo a inmigrantes provenientes de países con conflictos armados o crisis humanitarias.
Recientemente, se comunicó que ciudadanos de Afganistán y Camerún que residen en Estados Unidos deberán abandonar el país, debido a que sus permisos han sido anulados.
Este permiso humanitario fue establecido en 1990 para asistir a ciudadanos de países asiáticos en conflicto. Usualmente, los permisos otorgados bajo el TPS tienen una duración de entre 6 y 18 meses, al término de los cuales los beneficiarios deben regresar a sus lugares de origen.
De acuerdo con cifras de Reuters, esta medida afectará a más de 14.000 afganos y cerca de 8.000 cameruneses. Varias organizaciones defensoras de derechos humanos han manifestado su oposición a esta decisión.