Delincuentes, entre ellos un extrabajador, atacaron a la familia para robar una importante suma de dinero destinada a su próxima cosecha.
Únete al canal de Whatsapp de WapaEl pasado lunes 19 de agosto, la comunidad de Alto Kokari, en el distrito de Pichanaqui, Chanchamayo, se vio sacudida por una tragedia que ha dejado a la familia Matos devastada. Un violento asalto perpetrado por cinco delincuentes, entre ellos cuatro de nacionalidad venezolana y un extrabajador de la familia, resultó en la muerte de cuatro personas. Aquí te contamos los detalles de este desgarrador incidente.
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El ataque, que ocurrió alrededor de las 7 de la noche, tenía como objetivo robar una importante suma de dinero que la familia Matos había destinado para su próxima cosecha. Los delincuentes, armados y sin piedad, irrumpieron en el hogar familiar y sometieron a sus miembros, atándolos de manos y pies mientras exigían el dinero.
La brutalidad del ataque fue tal que, en medio de los golpes y amenazas, uno de los miembros de la familia, Wilber Matos, logró escapar. Aunque lleno de desesperación, Wilber consiguió esconderse entre la maleza y corrió a buscar ayuda. Sin embargo, al regresar, encontró a su familia y al trabajador que los acompañaba, todos fallecidos.
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Las víctimas de este violento ataque fueron identificadas como Zósimo Matos Carhuamaca (56) y Feliciano Cahuana Castro (56), quienes murieron en el acto. Cirila Eñejo Rivas (55) y su hijo Zósimo Matute Matos Eñejo (25), quienes inicialmente fueron encontrados con signos vitales, no resistieron la gravedad de sus heridas y fallecieron en el camino al hospital de Pichanaqui.
Uno de los detalles más perturbadores de esta tragedia es la implicación de un extrabajador de la familia en el ataque. Wilber Matos, quien sobrevivió al asalto, relató cómo uno de los agresores había trabajado brevemente en la chacra familiar, permaneciendo solo dos días antes de abandonar sus tareas. Este hecho añade una capa de desconcierto y dolor a una ya devastadora situación.
El brutal asesinato de los miembros de la familia Matos ha dejado una huella profunda en la comunidad de Alto Kokari. El sentimiento de inseguridad y el dolor por la pérdida de seres queridos han conmocionado a todos los vecinos, quienes ahora exigen justicia para las víctimas y mayor seguridad en la región.
La tragedia que ha golpeado a la familia Matos en Alto Kokari es un recordatorio doloroso de la violencia que puede irrumpir en la vida cotidiana de las personas. Mientras la comunidad y las autoridades buscan respuestas y justicia, el recuerdo de Zósimo, Feliciano, Cirila, y Zósimo hijo quedará grabado en la memoria de todos los que los conocieron. Este caso subraya la urgencia de fortalecer la seguridad en las zonas rurales y de proteger a las familias de actos de violencia tan atroces.