Este viernes, Turquía y Grecia registraron un intenso terremoto de casi 7.0 de magnitud, según informó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
Las autoridades del país turco han comenzado a describir los daños y pérdidas que se han suscitado en el lugar de Izmir o Esmirna, ciudad situada en la costa del mar Egeo, epicentro de este desastre que también registró un Tsunami.
"Algunos de nuestros conciudadanos están atrapados bajo los escombros", informó el ministro de Medioambiente de Turquía, Murat Kuru, sobre los trabajos de rescate que se llevan a cabo en los lugares más afectados.
Las imágenes que circulan en redes sociales y que fueron transmitidos por varios medios turcos, muestran a varios edificios desplomarse generando nubes de polvo que se elevan al cielo, mientras que los habitantes se precipitaban a la calle víctimas del pánico.
Cabe señalar que, Turquía se ubica en una de las zonas sísmicas más activas del mundo. En 1999, un sismo de magnitud 7,4 sacudió el noroeste del país, causando más de 17.000 muertos, un millar de ellos en Estambul.
El presidente de Turquía, Reccep Tayyip Erdogan, tuiteó: "Que te mejores pronto İzmir".
"Con todos los medios de nuestro Estado, apoyamos a nuestros ciudadanos afectados por el sismo. Tomamos medidas para comenzar el trabajo necesario en la región con todas nuestras instituciones y ministros relevantes", anunció, Erdogan.