Unas 60 niñas han sido hospitalizadas esta semana en Burkina Faso tras sufrir mutilación genital femenina (MGF), práctica prohibida desde 1996, confirmó hoy a Efe el organismo gubernamental encargado de erradicar la ablación femenina en el país.
"Todas las víctimas de la circuncisión fueron ingresadas en hospitales por hemorragias e infecciones", informó a Efe la responsable de la Secretaría Permanente del Consejo Nacional para la Lucha contra la Práctica de la Escisión (SP/CNLPE), Viviane Ursule Sanou.
Las víctimas tienen una media de edad de entre cinco y siete años, de acuerdo con Sanou, y fueron sometidas a una ablación de tipo II, que se caracteriza por la extirpación tanto del clítoris como de parte de los labios vaginales.
Las circuncisiones tuvieron lugar en la zona de Kaya, a unos 100 kilómetros al norte de la capital burkinesa, entre el 4 y el 6 de septiembre.
Una docena de niñas fueron admitidas este lunes en el Hospital Regional de Kaya, y otras cuarenta en el Hospital Protestante de Chiphra en Uagadugú, según medios.
Además, una treintena de progenitores y de comadronas encargadas de realizar el corte fueron arrestados y podrían ser condenados a una pena de entre seis meses y tres años de cárcel, según establece el código penal.
"Estamos en la temporada de lluvias y la vegetación es lo suficientemente frondosa como para que se escondan tras ella durante la mutilación", concretó Sanou.
"Nuestro desafío hoy -subrayó- es erradicar la ablación clandestina en bebés".
Alrededor del 75 % de las niñas y mujeres de Burkina Faso han sido mutiladas, pero solo el 9 % está a favor de esta práctica, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
"Esto no significa que hayamos fallado", matizó Sanou, pues "todos los casos fueron denunciados a través de nuestra línea de teléfono gratuita, lo que demuestra nuestro trabajo sobre el terreno y el mensaje sobre los efectos negativos de la mutilación genital femenina ha llegado a la gente".
Información de EFE