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02 May 2020 | 9:54 h

Pastor alemán fue adoptado por el Gobernador de Australia tras ser apartado por la policía

La historia de Gavel se ha hecho muy popular en Facebook luego de ser removido de su cargo por un peculiar motivo: “exceso de amabilidad”.

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    Gavel es un pastor alemán que ha vivido ligado a la policía durante mucho tiempo, pero su baja eficiencia obligó a sus superiores a removerlo de cargo por ser “demasiado amable”. Sin embargo, la suerte no le dio la espalda y se pudo conocer a través de Facebook que el cachorro fue adoptado por el Gobernador de Australia.

    Quizá muchos se preguntarán: “¿debe tener mayores responsabilidades?” La respuesta en un contundente “NO”, porque el perro que se negaba a olfatear explosivos ahora se dedica a dar la bienvenida a los visitantes y asistir a ceremonias importantes vestido de gala.

    Paul de Jersey, Gobernador de Queensland, fue quien vio las cualidades de Gavel y sin pensarlo dos veces decidió reclutar al cachorro para que formara parte de su ‘gabinete’ debido al gran potencial que mostraba para desempeñar el cargo.

    El representante en el estado de Queensland de la Reina de Australia, Isabel II, decidió nombrar al pastor alemán como el “perro oficial”; sin embargo, la cosa no iba a terminar en una simple mención porque se debía firmar un contrato donde se establecía sus deberes y obligaciones.

    Pastor alemán, juguetón por naturaleza

    El Gobernador Paul de Jersey sabe que no puede ir contra el instinto de Gavel y no le quedó más remedio que permitirle, de vez en cuando, olvidarse de sus buenos modales, tal como detallan las autoridades de Queensland en Facebook.

    No cabe duda que el cachorro ha encontrado el lugar perfecto donde le permiten ser como es: una mascota traviesa, juguetona, engreída y, sobre todo, muy responsable con sus labores.

    Queensland tiene un nuevo Gobernador

    Hasta el momento, según se pudo conocer a través de Facebook, Gavel se ha convertido en el consentido de todos los que laboran junto al funcionario y viene demostrando estar a la altura del cargo. Sin lugar a duda, la suerte nunca le dio la espalda a la tierna mascota.