Si estás planeando preparar un delicioso seco a la norteña o una sabrosa ensalada de garbanzos, pero, olvidaste poner en remojo las menestras la noche anterior, ¡descuida!, existen algunos truquitos de cocina para enmendar ese "error".
Desde tiempos inmemoriales hemos aprendido de generación en generación que los frejoles se dejan dentro de un bowl con agua toda la noche si se quiere comer menestras al día siguiente. Sin explicación alguna hemos continuado con la tradición y es momento de entender por qué.
(Foto/Kiwilimón)
Las legumbres y especialmente la fina piel que las recubre, contienen oligosacáridos (un tipo de hidrato de carbono) cuya molécula está formada por varias moléculas de azúcares simples, tales como la galactosa.
Los humanos no poseemos enzimas capaces de descomponer estos oligosacáridos en nuestro intestino. Las bacterias del colon, especialmente las del género Clostridium, sí los descomponen convirtiéndolos en gases como el dióxido de carbono, el hidrógeno y el metano.
Aunque la explicación se torne científica, ten por seguro que nuestras abuelas descubrieron esto muchos años antes, ¡nunca dudes de sus palabras!
Ahora que sabemos que la razón principal del remojar las legumbres es evitar tener gases, debes saber que para que los garbanzos secos se ablanden y facilitar la posterior cocción, deberían estar en remojo entre 12 y 24 horas cubiertos con el doble de agua.
Existen algunos trucos para que engañar al reloj. La primera opción es disminuir el tiempo de remojo (entre 8-10 horas), añadiendo al agua una cucharadita de bicarbonato o utilizar agua caliente y cambiarla varias veces.
Sin embargo, con este truco todavía necesitaremos bastante tiempo de remojo, si te animaste a preparar este plato en mismo día, es impensable esperar diez horas, por ello acá te dejamos una lista de formas rápidas para ablandar legumbres como frejoles, garbanzos o pallares.
(Foto/consejonutricional)
Ponemos las legumbres secas en un recipiente para microondas con agua (1 parte de garbanzos por 3 de agua) tapado durante 15 minutos a máxima potencia.
Luego, dejamos reposar los garbanzos en el agua, sin quitar la tapa durante una hora. Pasado este tiempo sólo tendremos que escurrir los garbanzos, lavarlos y cocerlos de forma normal.
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Si no tienes este artefacto o prefieres no utilizarlo, puedes realizar el mismo proceso sin microondas, sólo que el proceso es más lento.
(Foto/comococer)
Hervimos las legumbres durante 1 hora en un olla con agua. Pasada la hora apagamos el fuego y los dejamos reposar en el agua otra hora. Escurrimos y lavamos.
Otra opción muy efectiva es cocinar las legumbres de forma convencional añadiéndolos secos al caldo o agua con una cucharadita al ras de bicarbonato.
El bicarbonato creará espuma que habrá que ir quitando, pero tendremos los garbanzos cocidos en el tiempo que teníamos previsto porque se ablandarán con facilidad.