Más de un peruano ha usado en alguna oportunidad una frazada tigre para protegerse del invierno, pues sus características principales es la imagen de un tigre y su material de lana y poliéster, además de ser gruesa y pesada, es decir, es un súper cobertor.
Si bien no se tiene información de sus orígenes se comenta que los primeros modelos aparecieron en la tradicional fábrica de Tejidos Maranganí, en Cuzco, especializados en tipos de mantas que tiene un peso parecido a la de un colchón.
Esta mítica frazada es tiene un distribuidor oficial el cual es la fábrica de Tejidos Santa Catalina que fue fundado por el italiano Batolomé Boggio y el estadounidense Enrique Price en 1888. El éxito de esta sociedad llegaría tras 10 años luego que Mariano Prado Ugarteche se uniera como socio de la empresa y empezara su proceso de expansión.
Felipe Portocarrero explicó en su libro “El imperio Prado, 1890-1970” la importancia que tuvo el negocio textil en la riqueza del clan familiar de los Prado. En el texto se conoce que la empresa lideró el rubro de la lana, instaló varias sucursales y se expandió más allá de las expectativas hasta la década del 50 etapa donde las fibras artificiales y sintéticas empezaron a abrirse camino y ganar fuerza en la industria.
Durante el gobierno de Juan Velazco, la compañía textil caería en manos de sus trabajadores y en 1992, la familia Aragón tomaría el poder de la empresa.
En la actualidad, solo existe un local de Santa Catalina que está ubicado en la cuadra 4 del jirón Carabaya en el Centro Histórico de Lima.
Es importante recalcar que este 2019 la frazada tigre cumple 130 desde su aparición en las tiendas y se hiciera conocida por sus peculiares características que la hacen única e irremplazable en las camas de los peruanos. Es más, ni bien empezó a sentirse el frío los cibernautas empezaron a crear memes que tienen como protagonista a esta clásica frazada.