Una menor de edad de 12 años en Reino Unido falleció a causa de la COVID-19 luego de una semana tras desarrollar una tos leve. Fabiana Zoppelli sufría de una rara condición, de acuerdo a una investigación.
La pequeña Zopeplli fue diagnosticada con el síndrome de puerto flotante. Cuando la adolescente se enfermó de coronavirus el 1 de junio, su madre reveló que desarrolló un sarpullido y empezó a vomitar, por lo que fue trasladada a urgencias del Hospital Royal Oldham.
Como se sospechaba, la menor arrojó positivo a la prueba de descarte de COVID-19. Sus síntomas comenzaron a agravarse, incluso tuvo que usar un ventilador móvil. Lamentablemente, falleció luego de sufrir un paro cardíaco el pasado 7 de junio de 2020.
Un especialista mencionó que era el peor caso que había visto durante toda la ola pandémica de la COVID-19.
La familia de Fabiana se mudó a Reino Unido desde Italia hace seis años. Ella crecía a un ritmo más lento y tenía un retraso en el desarrollo del habla por su condición.
"Nunca hemos visto a niños sufrir por complicaciones de COVID como lo hizo Fabiana. Creímos que ella doblaría una esquina y mejoraría. Nunca he visto a ningún niño transferido para cuidados intensivos en los últimos 18 meses. Este es un caso muy inusual en un niño", dijo el doctor Prakash Kamath.
La investigación detalló que la menor de edad perdió la vida debido al síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico y al síndrome respiratorio agudo severo causado por la COVID-19.
"Fabiana estaba muy, muy enferma y tuvo una mala suerte excepcional de tener las dificultades pulmonares que desarrolló al mismo tiempo que el síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico", remarcó el forense asistente Nicholas Flanagan, según el portal Daily Mail.
De acuerdo con los investigadores, además de los problemas respiratorios, ritmos cardíacos irregulares, caída del cabello, hay otras complicaciones. Los sobrevivientes de COVID-19 pueden presentar alguna de las siguientes afectaciones:
-Sistema respiratorio: tos persistente, niveles bajos de oxígeno en la sangre y dificultad para respirar.
-Sistema nervioso: ictus, problemas de memoria, problemas con los sentidos del gusto y el olfato, dolores de cabeza.
-Salud mental: ansiedad, depresión, problemas de sueño y abuso de sustancias.
-Metabolismo: nueva aparición de diabetes, obesidad y colesterol alto.
-Sistema cardiovascular: enfermedad coronaria aguda, insuficiencia cardíaca, palpitaciones y ritmos cardíacos irregulares. Piel: erupción y caída del cabello.
-Sistema musculoesquelético: dolor articular y debilidad muscular. Salud: malestar, fatiga y anemia.
-Sistema gastrointestinal: estreñimiento, diarrea y reflujo ácido.
-Riñón: lesión renal aguda y enfermedad renal crónica que, en casos graves, puede requerir diálisis.
-Regulación de la coagulación: coágulos de sangre en piernas y pulmones.