El mandatario Francisco Sagasti descartó la posibilidad de adquirir vacunas contra la COVID-19 por el sector privado y gobiernos regionales, pues reiteró que las farmacéuticas solo realizan negociaciones de Gobierno a Gobierno, debido a la escasa producción y alta demanda.
“Cuando la vacuna pueda producirse en grandes cantidades, como la vacuna contra la influenza o sarampión, allí todos podrán comprarla, mientras solo se negocia con los Gobiernos”, señaló durante una conferencia de prensa en Áncash, donde entregó 10.500 dosis de la vacuna Pfizer.
En ese contexto, reiteró que la producción de vacunas está en un número limitado de empresas, por lo que su capacidad de producción es muy limitada. “Las farmacéuticas lo han dicho a diestra y siniestra, no negocian ni con sector privado ni gobiernos subnacionales. (…) Ningún gobierno regional o empresa privada puede tener la capacidad de negociar bien”, precisó.
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Aseguró, además, que su Gobierno cuenta con abogados en Ministerio de Salud, de Economía y Finanzas y Relaciones Exteriores, por lo que otros sectores no tienen esa capacidad de gestión para llevar a cabo la compra de dosis contra el coronavirus. “No hay prohibición, simplemente no se puede todavía. No es posible, simplemente”, aclaró.
El presidente también dejó en claro que espera culminar con la vacunación de adultos mayores antes de finalizar su mandato.
“La vacuna es un bien escaso, una docena de laboratorios la producen. El proceso de negociación ha sido difícil y complicado y obliga a una secuencia de vacunas”, añadió.
Por último, Sagasti detalló que, cuando finalice el proceso de los adultos mayores, proseguirá con las personas que presenten males congénitos, genéticos o degenerativos (como distrofias musculares, síndrome de Down, entre otras). Ello incluye también a pacientes que reciben tratamientos de diálisis y contra el cáncer.