La comunidad científica está en alerta por dos personas de 30 años con COVID-19 en Brasil que se contagiaron con la enfermedad en noviembre de 2020 con dos variantes distintas.
Los científicos compartieron un estudio preliminar en el medio especializado medRxiv, en el cual revela que estas dos personas arrojaron positivo simultáneamente a las cepas de COVID-19 conocidas como B.1.1.28 y B.1.1.33.
Asimismo, la coinfección de COVID-19 mostró no tener ningún efecto adverso en los pacientes, pues vencieron la enfermedad viral sin necesidad de ser internados.
"Esto ha generado dudas sobre cómo estos virus pueden interactuar en una persona infectada y qué podría significar para el surgimiento de nuevas variantes", indicó Maitreyi Shivkumr, profesora de biología molecular de la Universidad de Montfort en el portal The Conversation.
De acuerdo con Shivkumar, la coinfección de COVID-19 genera temor que la enfermedad letal tenga nuevas mutaciones de forma más rápida. Esto se debe a que los coronavirus pueden padecer grandes cambios en su secuencia genética mediante un proceso conocido como recombinación.
"Estas coinfecciones pueden generar combinaciones y generar nuevas variantes incluso más rápido de lo que ha estado sucediendo", aseguró el investigador principal del estudio, Fernando Spilki, virólogo de la Universidad Feevale, en Brasil.
Cabe mencionar que los datos no sugieren que el contagio con más de una variante de COVID-19 conlleve a una afección más grave. No obstante, es importante un monitoreo mayor para investigar cómo actúa el virus.