La miel posee grandes riquezas naturales muy beneficiosas para el ser humano, lo cual lo convierte en el complemento perfecto para sentirte mejor en todos los aspectos de la vida.
La miel es uno de los alimentos que no puede faltar en casa ya que gracias su alto contenido de minerales (hierro, calcio, fosfato, cloruro de sodio, potasio y magnesio). Además de vitaminas, glucosa y fructosa, lo convierte en un producto alimenticio sano y seguro para niños, jóvenes y adultos.
Por ello, en las siguientes líneas te mencionaremos 5 poderosas razones para tenerla en casa como una aliada para tu salud, según señala el Journal of Chemical y compartida en el portal Salud180. ¡Atenta y toma nota!
De acuerdo a Zahiruddin Othman, investigador de Universidad Sains Malaysia, este endulzante natural ayuda a fortalecer la memoria a corto plazo y mejora la concentración de las mujeres en edad menopaúsica.
Es otra buena razón por la que este elemento no debe falta en casa es que es un tópico efectivo para tratar diversas infecciones y heridas, entre úlceras en piernas, por pie diabético, lesión o cirugía y hasta en quemaduras, señala el estudio del Journal of Chemical.
El contenido de azúcar de la miel ayuda a recurar la vitalidad, por lo que es muy recomendable su consumo. Las personas mayores que beben un vaso de agua con media cucharada de miel rociada con canela en polvo en la mañana y alrededor de las tres de la tarde reducen el cansancio físico en un plazo de una semana.
Todos los días, media hora antes del desayuno (cuando el estómago está vacío) y antes de dormir, beber una taza de agua caliente con miel y canela en polvo favorece la reducción de peso. Tomar esta mezcla de manera regular evita que la grasa se acumule en el cuerpo a pesar de haber consumido alimentos altamente calóricos.
Con la mezcla de miel, agua y una cucharada de canela en polvo se crea una pasta que al aplicarse con un masaje en la zona afectada reduce considerablemente el dolor, dadas sus propiedades antiinflamatorias. Se recomienda hacerlo por las mañanas y noches.