El constitucionalista Alberto Borea analiza el impacto de los principales acontecimientos tras la segunda vuelta. Sin embargo, resalta la necesidad de enfocarse en el futuro y esboza planteamientos que deberá tener en cuenta Pedro Castillo en caso sea declarado ganador de las elecciones.
En entrevista con el diario Correo, Alberto Borea asegura que hubiera preferido una actitud más amplia del JNE. “He criticado eventualmente la falta de imparcialidad que ha tenido y un procedimiento que no siempre ha sido similar para todos. Por ejemplo, en temas de retirar candidatos de una fórmula presidencial, a George Forsyth lo quitaron por ‘quítame esta paja’. Y, sin embargo, en el caso de Dina Boluarte, que es evidente que está en un tema de confrontación con las normas electorales, la mantienen y no pasa nada. Entonces, eso me parece sumamente inequitativo”, refirió.
También indicó al diario Correo, que el JNE tiene que resolver. “Y el argumento de que hay muchas impugnaciones me parece de poco peso. Si vencieran los 45 minutos (de un partido), juegas un suplementario o un adicional. Es cierto que el texto establece, como decía la Constitución del 79 también, que el periodo presidencial comienza el 28 de julio, pero si no ha terminado de definir quién es el que ha ganado las elecciones; lo definirá el 5 de agosto y no se va a caer el mundo porque eso suceda y no se va -como dicen- a sustraer la materia, ¿Por qué? Porque el 5 de agosto, el señor Castillo o la señora Fujimori esperamos sigan viviendo y adicionalmente esperamos que el Perú siga existiendo”, manifestó.
Asimismo, Borea, dijo que en consecuencia, “no va a pasar nada” si es que se asume el poder el 6 o 10 de agosto, mientras tanto hay una autoridad elegida y que se va a elegir, que va a ser el presidente del Congreso y que va a conducir interinamente el Estado.
“Lo ideal es que el JNE actúe con mayor prontitud. Que, en vez de ver 10 actas, vean 30. Creo razonable que los actos que ha pedido el JNE, que las impugnaciones que son similares se resuelvan en una causa”, enfatizó en la entrevista con Correo.
“Personalmente pienso que las objeciones sobre tema electoral, porque estamos hablando de justicia electoral, es una atribución exclusiva del JNE. Después vendrá el tema de la responsabilidad penal, pero lo primero que ellos deben resolver, la primera tarea que les corresponde es resolver quién ganó las elecciones”, puntualizó el exsenador.
Por otro lado, aseguró que espera que el JNE esté actuando de la mejor manera. “Yo estoy en desacuerdo con muchas de las cosas que cree, pero, al final de cuentas, es la autoridad vigente y que no se discutió antes del proceso electoral. Entonces, discutirla ahora en el post proceso electoral, es una cuestión post facto”.
Asimismo, durante la entrevista con Correo, señaló que hubiera preferido que el doctor Arce continuara ejerciendo sus votos singulares en este tema. “Creo que el doctor Rodríguez Monteza está en una situación similar, pero no. Tiene que terminarse este proceso electoral, tiene que pronunciarse quién es presidente o presidenta en el término necesario para resolver las impugnaciones y juntos vamos a después a analizar las otras cosas”, precisó.
Del mismo modo, indicó que tenemos que concentrarnos en el futuro del Perú. “Efectivamente, quien gane, que es alguna de estas dos personas que ha obtenido cerca del 10%, no pretenda que con ese 10% le alcanza para trastocar el sistema peruano o para inmovilizar el sistema peruano”.
“Espero que los siguientes meses sea un escenario de integración y de concordia, donde se discutan los temas, donde no se detenga la marcha económica del país, donde efectivamente haya recursos para poder redistribuir mejor; donde se discuta la redistribución, donde se discuta el papel de cómo vamos a atender los servicios básicos primarios” subrayó Alberto Borea en la entrevista con Correo.
Durante la entrevista con el diario Correo, Borea brindó algunas recomendaciones a Pedro Castillo, en caso sea proclamado ganador de las elecciones.
La primera recomendación que señaló, es que tenga bien en claro que no se puede hacer una representación corporativa como pretende. Es decir, un grupo de ingenieros, campesinos, los mineros. “Eso no, porque ahí no pones al hombre como igual, sino en razón de una función y esa no es la integración ciudadana que necesitas para hacer una Constitución democrática”, sostuvo.
Además, indicó que no puedes llevar al Congreso a una suerte de embajadores de intereses. “Tú lo que tienes que llevar es gente que piense en la integralidad del país. El presidente no puede hacer cuestión de confianza en temas constitucionales”.
MÁS INFORMACIÓN: Luis Miguel Castilla: Propuesta de Asamblea Constituyente genera incertidumbre en el país
También dijo, que las modificaciones constitucionales son temas de grandes acuerdos nacionales, no son imposiciones de quien ganó por una nariz. “Castillo ha dicho que la Constitución debe tener olor, color y sabor a pueblo. Sí, estoy de acuerdo con eso, pero lo que sucede es que él no es el pueblo. Y el olor, color y sabor es el olor, color y sabor de todos, de los que votaron por él y de los que no”.
Y finalmente, Borea señala que no se puede romper el principio de alternancia. “Él dice ‘yo quiero hacer una Constitución para que esto siga casi permanentemente’, es decir, lo mismo que Maduro en Venezuela; ya, esa no es una Constitución democrática. Tú tienes que mantener siempre el principio democrático y de alternancia. Eso me parece fundamental”, concluyó.
Es abogado, experto en derecho constitucional, procesal constitucional y litigios en general. Ha sido docente y expositor en diversas universidades. También tiene trayectoria política, como diputado y senador, líder de movimientos políticos.