El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, deshizo varios decretos que Donald Trump legalizó en su gobierno, entre ellos, eliminó el que prohibía que personas transgénero sirvan en el ejército.
El nuevo decreto dice así: “establece la política de que todos los estadounidenses que estén calificados para servir en las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos deberían poder servir”, según la Casa Blanca.
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En esa línea, Biden consideró que “la identidad de género no debería ser un obstáculo para el servicio militar, y que la fuerza de Estados Unidos se encuentra en su diversidad”.
Como se recuerda, está política, catalogada como discriminatoria por los activistas LGBTQ, fue anunciada por primera vez por Trump en julio de 2017 a través de Twitter. La prohibición bloqueaba específicamente a las personas a las que se les diagnosticaba una afección conocida como disforia de género para que no presten servicio con limitadas excepciones.
Según el expresidente Donald Trump, las tropas transgénero en el ejército provocarían “enormes costos médicos y trastornos”. Esto fue desmentido en un estudio elaborado por Rand Corp, encargado por el Departamento de Defensa, en el año 2016.
La investigación concluyó que permitir que las personas transgénero sirvan abiertamente en el ejército tendría un “impacto mínimo” en la preparación y la salud costos de atención.