Lizzo canta rap, baila twerking y toca la flauta travesera. Pesa más de cien kilos y ama su cuerpo. Sus actuaciones son todo un espectáculo musical y sus vídeos se han convertido en un fenómeno en Internet por la manera en que muestra su cuerpo sin tapujos, ni prejuicios.
Su tercer disco, "Cuz I Love You" (Atlantic), en cuya portada aparece completamente desnuda, vio la luz en mayo y ha sido su carta de presentación para el gran público. El videoclip del tema "Truth Hurts" ha sido visto por cerca de 60 millones de personas en YouTube, y es todo un fenómeno en Internet.
Lizzo, que ha convertido su proceso personal de aceptación y autoconfianza en parte de su carrera, es un icono del movimiento "body positive".
"Sé que mi mera existencia es una manera de activismo, especialmente para la comunidad que lucha por la concepción de un cuerpo positivo (...) y estoy orgullosa , añadió. Pero no soy el ejemplo para nada, solo hago música para sentirme mejor y si con ello puede ayudar a cambiar al mundo, fenomenal".
Sus actuaciones en Glastonbury y Coachella consiguieron reunir a toda una multitud, que coreaba y se dejaban llevar por la espontaneidad que la artista derrocha en directo.
Sobre el escenario Lizzo intercala sin despeinarse el "bitch" (perra) de sus canciones, con twerking (perreo) y pasajes en los que toca la flauta travesera, un instrumento que domina a nivel virtuoso y que estudió en el conservatorio.
"Me encanta ver las formas que genera mi cuerpo cuando me muevo", dijo una entrevista
La artista, nacida Melissa Viviane Jefferson (1988), se acompaña sobre el escenario por un coro de bailarinas, todas tallas XL, y estilismos de infarto. En el festival inglés apareció vestida con un ajustado body tanga de tonos lila destelleantes y una larga melena recogida en una coleta.
Su fondo de armario está formado por bodys y ajustados vestidos, ropa interior que luce sin pudor y prendas pegadas al cuerpo que incorporan trasparencias, brillos, flecos y plumas. En sus redes sociales en ocasiones se muestra desnuda o semidesnuda, en una muestra del amor que siente por su cuerpo.
"Me encanta ver las formas que genera mi cuerpo cuando me muevo", dijo una entrevista junto a la actriz Jameela Jamil ("The Good Place") en el proyecto "I Weigh" (yo peso).
"Cuándo más segura estoy es sobre el escenario, pero también es donde más vulnerable soy. Si algo sale mal, como que se me empiezan a caer los pantalones, me siento la persona más fea del mundo", señalaba.
Su impactante puesta en escena, acompañado por un fuerte mensaje de aceptación y proceso personal, ha generado un fiel grupo de fans que aumenta allá donde va. Su última actuación hace un mes en los BET Awards (Black Entertaiment Awards), consiguió levantar a toda la audiencia de sus sillas y poner a bailar a la mismísima Rihanna.
El mensaje personal de aceptación y autoconfianza que la cantante intercala en sus temas, que combina con rap, pop y R&B, no siempre fue parte de su trabajo.
La cantante sitúa el principio de esta transformación en una entrevista del proyecto "Stylelikeu", un canal de YouTube, en el que entrevistados hablan sobre su proceso de autoaceptación mientras se quitan prendas.
"Cuándo más segura estoy es sobre el escenario, pero también es donde más vulnerable soy. Si algo sale mal, como que se me empiezan a caer los pantalones, me siento la persona más fea del mundo", señalaba en la grabación.
Allí, fue capaz de decir por primera qué parte de su cuerpo le gustaba más, que es su piel. Aquella revelación fue la base de "My skin" (mi piel), el tema principal de su segundo álbum, "Big Grrrl Small World" (chica grande, mundo pequeño) y el comienzo del despegue de su carrera, a la que todavía le queda mucho por recorrer.
(Con información EFE)