“No me agarren de la cintura”, la petición que cada vez más mujeres hacen
Se debe poner un alto cuando los hombres transgreden nuestro espacio personal.
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En la actualidad el tema del acoso y violencia de género y todo lo que signifique o represente sometimiento a la mujer tiene hoy gran relevancia y genera mucha sensibilidad de algunos.
Cada día se alzan más las voces de esta problemática que está cambiando, pero aún muy lentamente.
El poco avance y cambios de políticas pueden indicar significativos avances, pero aún hay un largo camino por recorrer.
Reconsiderar los que se creía “correcto”
En cuanto a las cosas que se podía hacer y era correcto, han cambiado tanto que para algunos resulta poco claras y confusas.
Esto tiene que ver con lo permisible en cuanto a lo que se pensaba sobre los acercamientos físicos a las mujeres y que hoy viene abriendo debates que empiezan en las redes sociales donde muchas mujeres han compartido su opinión.
Contacto permisible "sin permiso"
El tema puntual es el de los hombres heterosexuales que, aunque no te conozcan ponen sus manos sobre tu cintura sintiendo que tienen el derecho de hacerlo.
Esto resulta para muchas mujeres una completa invasión a su privacidad y espacio personal, ya que no existe confianza y los hombres ni siquiera esperan alguna señal para confirmar si tú lo permites.
Este caso viene siento tema de debate en redes sociales gracias a una cantante chilena que compartió su opinión e inició la conversación de este polémico tema.
Luego recibió diversas respuestas de mujeres que opinaban de igual manera apoyando esa incómoda sensación.
Cantante Princesa Alba inicia debate
Mujeres estuvieron de acuerdo con la cantante
Un saludo innecesario
El significado del acto
Lo ideal frente a una situación similar o que sea como esta que es tan común es saber poner límites en aquello que te gusta y en lo que no te agrada sin dejarte cambiar de opinión así para muchos sea normalizado.
Es una mala costumbre callar o ignorar aquello que nos molesta hasta el punto de reprimirlo por completo para no generar molestias a otros. Sin embargo, esto no será nunca sano para nadie.
Lo mejor es expresar de manera educada aquello que te molesta para que las actitudes no se vuelvan a repetir otra vez, sobre todo si tiene que ver con tu espacio personal.
La idea no es que no permitas ser rodeada por ningún hombre otra vez, lo que se tiene que tener en cuenta son factores como el contexto, la confianza y el permiso para poder hacerlo.
Esto depende de cada uno; sin embargo, es mejor prevenir estas actitudes.
