La mexicana María Trinidad Matus de 25 años tenía muchas pasiones, entre ellas la música, la naturaleza y las sirenas. Uno de sus grandes sueños era el poder recorrer el mundo sola, por ello el 26 de julio pasado se enrumbó hacia Costa Rica, sin saber que este exótico país terminaría siendo su tumba.
“Hoy empieza mi viaje sola después de muchísimo tiempo de haber deseado irme por el planeta a viajar sola y por fin lo hago. Llegó la hora de llenarme de naturaleza. Costa Rica, pura vida”, escribió en su cuenta de Instagram.
La joven era compositora clásica, de canto y jazz, meses atrás abrió una página en Facebook para promocionar el lanzamiento de su primer disco, el cual describió como un “proceso mágico”.
El título de su material era “Marmaid”, el cual inició el proceso de realización en 2016. Es más, para este 15 de agosto tenía su primera presentación con Monocrom en la ciudad de Polanco, México. Pero todo ha cambiado.
Tras una semana y media de iniciar su sueño de recorrer el mundo, la joven fue hallada golpeada, ultrajada y muerta en la playa El Carmen de la provincia de Puntarenas, en Costa Rica. Fue su amiga quien puso la denuncia de su desaparición luego que dos hombres trataran de robarle sus pertenencias.
El mundo la culpa por querer cumplir sus sueños
El feminicidio de Mar provocó dolor entre sus familiares e indignación de las personas que la conocían, ya que al conocerse la noticia no faltaron los miles de comentarios en las redes sociales echándole la culpa de su muerte.
“¡Pues no chinguen! ¡Están viendo que la tendencia son feminicidios y todavía se aventura sola! Como dice mi abuelo ‘están viendo que la chucha es brava y le pateas el catre’”.
Una vez más las opiniones del mundo se centraron en la fallecida y no en los hombres que la asesinaron.
No es novedad que el mundo no es seguro para nadie, pero más para una mujer. Según la Organización de las Naciones Unidas son alrededor de 64 mil mujeres y niñas que son agredidas cada año. Pero la solución no es encerrarnos en casa y esperar a que la situación cambie. Tenemos derecho a vivir una vida sin tener que estar dando explicaciones de nuestros actos y, sobre todo, libres de violencia.
“Con gran dolor le decimos adiós a María Trinidad quien fue asesinada en las playas de Costa Rica, que el mundo entero sepa que TÚ NO ERES CULPABLE DE NADA, tú solo querías conocer el mundo. A ti querida Sirena te prometemos que no descansaremos hasta hacer justicia”, escribió una joven en su cuenta de Instagram.
Es lamentable que las mujeres tengamos que estar pendientes de dónde caminamos, qué nos ponemos para no ser agredidas y terminar muertas. Se pide justicia, que las personas que perpetraron este crimen sean condenadas, pero también de que llegue el mensaje que las mujeres tenemos los mismos derechos que los hombres: de vivir y cumplir nuestras metas.