Brad Pitt aparece en falda en el preestreno de su película Bullet train en Berlín y nuevamente se abre la conversación hacia el rompimiento de brechas de género en cuestión de ropa. Y es que el actor Hollywoodense no tuvo mejor idea que llevar una falda de lino con un look ‘all black’ con unas botas acharoladas para llevar su estilo a otro nivel.
Cuando los reporteros le preguntaron acerca de la elección de su atuendo días después el actor respondió que quería estar fresco ante la intensa ola de calor. “Se la recomiendo a los hombres de Inglaterra, seguro que les ayuda a mantenerse frescos”, comentó bromeando.
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Por su puesto, muchos usuarios en redes sociales no dudaron en cuestionar la elección del outfit de Brad Pitt como si fuera una novedad que el ex esposo de Angelina Jolie luciera con elocuencia una falda. En 1999 fue fotografiado por Mark Seliger para la revista Rolling Stone como promoción de ‘El club de la pelea’. Fueron unas icónicas imágenes que sentaron grandes precedentes para aquella época en donde la liberalización de la falda y otras prendas asociadas a lo femenino no era algo tan común.
Y si queremos echar la vista más hacia el pasado encontraremos que otras figuras, incluso del mainstream del rock, como David Bowie o Freddy Mercury también lo hicieron demostrando un avance en materia de género. Al respecto, el editor de estilo de la revista estadounidense Women’s Wear Daily, Alex Badia, comentó para Icon de El País que esta acción se perfila como una lección de moda generalizada.
“Brad Pitt es uno de los muchos, dentro de lo que es la moda de hombre, que está redefiniendo las normas de la alfombra roja y del traje clásico, porque es una pieza que ha perdido el interés. Yo ya estoy harto de ver a gente sustituyendo la americana por bléiseres o recurriendo a camisetas en vez de camisas”, comentó.
En la actualidad figuras como Harry Styles son lo más cercano a una moda sin género quien ha apelado durante toda su trayectoria a utilizar múltiples prendas de naturaleza femenina reinterpretando así la moda masculina convirtiéndose en uno de los grandes propulsores de esta moda para la Generación Z.