Increíble, aunque creas que es una idea absurda, el mundo de la moda y pasarela, ya está dejando atrás el tradicional y soñado vestido blanco lleno de detalles para llegar al altar. Actualmente reconocidas marcas y diseñadores apuestan por el tono más elegante, pero oscuro, en cuanto a trajes de novias se refiere.
Sí, vestidos de novia negros. Vale la pena hacer memoria y recordar que el color blanco, crema o marfil, para caminar por el altar, solo se puso de moda hasta 1840 cuando la Reina Victoria de Inglaterra optó por estos tonos para celebrar su compromiso. Pero si hace algunos años te escandalizaste porque Shenae Grimes, Avril Lavigne y Sarah Jessica Parker se casaron de negro, hoy te sorprenderás por la nueva apuesta de las casas de moda internacionales.
Las siluetas, cortes y telas han evolucionado en cuanto a vestidos de novia se refieren, pero estos cambios no solo se han visto reflejados en el tradicional blanco. Sin embargo, 2021 es el año de la excepción a la regla, es por ello que los vestidos negros de boda son el ‘look’ ideal para lograr un giro llamativo y dramático, muy en tendencia para bodas de otoño 2021.
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Según informa la revista Vogue en un especial de bodas que acaba de realizar, una novia que sabe esta nueva tendencia por el color negro a la perfección es Elle McPherson-Yoon, la consultora de moda, que, para su celebración nupcial en 2020, pasó de un vestido de tul blanco de Viktor & Rolf para su ceremonia a uno de los vestidos de novia negros más famosos del momento, creado por Emilia Wickstead para la recepción.
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‘No hace falta decirlo, pero el negro es elegante y siempre lo será. El vestido era alegre, irreverente y se sentía como algo natural’, le afirma a Vogue UK la experta en moda sobre su selección alternativa. ‘Tan natural, de hecho, que el color del vestido no se convirtió en el punto focal de la noche. Se mezcló perfectamente con el entorno y, para mí, fue un éxito’ subrayó.
Asimismo, McPherson-Yoon dice que la decisión de optar por un LBD se derivó al mantenerse fiel a su estilo personal. 'Creo que me mantuve ‘on-brand’', afirma. ‘No sé qué quiera decir esto sobre mi estilo; pero los invitados estaban encantados, no se sorprendieron en lo absoluto de verme con un lazo enorme en la espalda’.
Al igual que el enfoque de McPherson-Yoon, un vestido negro podría ser el atuendo perfecto para una novia moderna, en busca de algo que refleje el espíritu de las celebraciones con aforo limitado, ya que no deja a un lado el ‘wow factor’ que todas esperan este día.
Sin duda, el tono más oscuro que podemos encontrar es básico de la mayoría de los armarios femeninos, por lo que aquellas que opten por el negro nupcial tendrán innumerables oportunidades futuras para usar el vestido que compraron, ya sea que se inclinen por modelos cortos y dulces de Saint Laurent y Dior, o una iteración romántica de Simone Rocha o Erdem.