Si bien Chanel siempre ha sido una marca importante en el mundo de la moda, hubo un período de crisis en el cual los dueños estaban considerando vender la firma si esta no lograba superar el hecho que seguían a flote por la venta de perfumes. Fue ahí donde Karl Largfeld tomó las riendas. Con 36 años al mando, veamos cómo el 'Káiser' logró convertir piezas típicas de Chanel, en iconos propios de la marca.
Desde un principio, Karl Lagerfeld sabía el potencial que tenía Chanel y en lo que esta marca se podría convertir, por ello, una de las primeras cosas que hizo al asumir el cargo directivo fue hacer que las cadenas (que Gabrielle Chanel usaba para favorecer la caída de sus chaquetas) sean el accesorio o remate ideal de los bolsos acolchonados clásicos.
Es una combinación clásica que no solo ha estado presente en los miles de diseños de Chanel, pero que además forman parte de la identidad personal y corporativa de Karl Lagerfeld.
Puede que sea una de las piezas más icónicas, pero la camisa de ‘marino’ a rayas, fue un hit en los 30’ (cuando Chanel la introdujo) pero perdió popularidad años después. Karl Lagerfeld re introdujo la camisa a rayas en 1990 y le estampó la doble ‘C', haciéndola una prenda clásica.
Como era de esperarse de la influencia masculina que ha y siempre tendrá Chanel son los trajes, y este estuvo inspirado en una pieza que poseía el amante de ‘Coco’, el Duque de Westminster. Desde que llegó a la firma en 1983, Karl Lagerfeld adoptó esta pasión y siempre la incluyó con un diseñado renovado en las pasarelas.
Las perlas formaron parte de la identidad de la misma Gabrielle Chanel, que, al ser una aficionada del Charleston, incorporaba este accesorio a todos sus outfits y creaciones. Karl, no tuvo dificultad en hacer lo mismo pero con un giro moderno y en todas las formas imaginables. Incluso, las usaba en sus propios atuendos.
Chanel creó la 2.55 para sí misma ya que no quería un bolso que tuviera que sostener con las manos. Desde entonces, este modelo ha sufrido alterado y se le añadió las dos ‘C’ entrelazadas en el cierre. El ‘Káiser’ se encargó de rediseñarla de todas las formas posibles, añadirla en los desfiles, fotos y filmes de Chanel, haciéndola una pieza icónica que perdurará a lo largo de los años.
Han pasado más de cinco décadas desde su creación en 1957 y el zapato bicolor, característico por tener la punta en una tonalidad distinta, ha sido reinventado múltiples veces gracias a Karl Lagerfeld: en alpargatas, balerinas o ‘slingbacks’. El ‘Káiser’ supo aprovechar el potencial de este zapato e incorporado múltiples veces en los desfiles de Chanel.
El vestid negro fue uno de los primeros triunfos de Gabrielle Chanel en el mercado mundial hasta convertirse en una pieza infaltable. Desde su llegada a la casa de moda francesa, Karl Largerfeld siempre incorporó el ‘little black dress’ en todas sus colecciones logrando darle ese aire moderno y fresco cada una de las veces.
El trabajo de Karl Largerfeld es quizás, el responsable de la imagen que tenemos de la marca y de la misma Gabrielle Chanel. Su huella en la casa de moda francesa es innegable e irrepetible y su legado perdurará por siempre.