A puertas del fin del año escolar, los niños ya piensan en las vacaciones. Sin embargo, es necesario que nuestros hijos continúen aprendiendo durante el verano.
Según la Asociación Nacional de Aprendizaje de Verano de Estados Unidos, los niños pueden llegar a perder hasta 2 meses de habilidades matemáticas durante sus vacaciones. Entonces, ¿cómo podemos ayudar a nuestros hijos a encontrar un equilibrio entre la diversión y el aprendizaje durante el verano?
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El aprendizaje online como aliado
El aprendizaje online viene ganando popularidad en el Perú como la alternativa más divertida, sencilla y efectiva para que nuestros hijos puedan adquirir conocimientos en el verano, sin sacrificar su tiempo de esparcimiento.
De hecho, esta época del año es propicia para afianzar conocimientos en cursos clave como matemáticas y ciencias, sin la presión de entrega de trabajos, rendir exámenes y sin tener que presentar tareas.
“Sin actividad intelectual, el cerebro olvida lo aprendido; por ello la brecha entre los niños que estudian en verano y los que no lo hacen es muy notoria durante el retorno a clases. Tomando esto en cuenta, es indispensable que nuestros hijos estudien en vacaciones sin comprometer su descanso, la playa y el tiempo con los amigos. El e-learning es un gran aliado para lograrlo”, afirma Javier Arroyo, cofundador de Smartick, método de aprendizaje online de matemáticas.
Los beneficios del aprendizaje online
¿Cuáles son los beneficios del aprendizaje online como opción de vacaciones útiles? Quizás el más importante es que los niños pueden estudiar desde cualquier lugar y en cualquier horario, ya que durante vacaciones muchas familias planifican viajes.
Asimismo, lo único que se necesita para acceder a una plataforma online es conexión a Internet y una computadora, laptop o tablet.
Otro punto importante para todo padre de familia es la economía. En esa medida, hacer vacaciones útiles vía online elimina los costos de traslados, pagos a profesores particulares, libros, entre otros. El único gasto por hacer es la suscripción a la plataforma.
“Es importante también que el tiempo de estudio sea mucho menor que el dedicado a actividades recreativas, de modo que nuestros hijos sientan la ruptura con la rutina escolar. Para nosotros, 15 minutos al día es tiempo suficiente para que los niños puedan reforzar programación, matemáticas, lógica y razonamiento de forma divertida y eficiente”, añade el empresario.
