A nosotras nos encanta engreír a nuestra familia, sobre todo a nuestros hijos. Por esta razón, hoy te traemos la receta de una deliciosa, muy sencilla y divertida tarta arcoíris. Lo mejor de este postre, que a los niños les encanta, es que no necesitas horno para prepararlo.
Ingredientes
- 200 gramos de galletas de vainilla trituradas
- 150 gramos de mantequilla derretida
- 4 cucharaditas de chispas o grajeas de colores divididas en dos partes
- 750 gramos de queso crema
- 100 gramos de azúcar
- 1 cucharada de esencia de vainilla
- 250 gramos de crema de leche
- 4 cucharaditas de gelatina sin sabor disuelta
- Colorante vegetal comestible (los colores puedes elegirlo tú, pero hoy utilizaremos verde, rojo, amarillo y azul)
Preparación
Lo primero que debes de hacer es, en un recipiente coloca las galletas trituradas y la manteca derretida, remueve bien ambos ingredientes.
Luego vas a añadirle las chispas de colores o las grajeas y vuelve a mezclar todo. Cuando ya tengas la pasta, lo vas a colocar de fondo en un recipiente desmontable.
Lo llevarás a la refrigeradora y lo dejarás por 30 minutos. Mientras pasa el tiempo, en otro recipiente colocarás el queso crema, el azúcar, la cucharadita de vainilla, crema de leche, las cuatro cucharadas de gelatina de sabor disuelta y lo vas a batir todo.
Cuando esta mezcla esté lista lo vas a dividir en cuatro recipientes diferentes. En cada uno de los potes vas a agregarle los colorantes vegetales comestibles. Con cinco gotas será suficiente para darle color.
Una vez que haya pasado los 30 minutos, retira de la refrigeradora y coloca encima la mezcla. Eso sí, debes de colocar un color encima del otro y lo dejas endurecer por dos horas.
Para finalizar decóralo espolvoreando las grajeas y decorándolo con chantillí o con lo que más te guste.