A través de Instagram, la madre de Ximena Hoyos, Ángela Pajares, denunció que su expareja la agredió física y psicológicamente.
Ángela Pajares detalló que Hugo Castro Muños la agredió en su departamento el domingo 23 de marzo y que toda esa violencia la presenció su hijo de 11 años. En la publicación, la mamá de Ximena Hoyos contó cómo sucedió el episodio de violencia.
Según relata Ángela Pajares, debido al decreto de Estado de emergencia y la orden de aislamiento social obligatorio que dio el presidente Martín Vizcarra, ella lo invitó a Castro a quedarse en su departamento.
Sin embargo, un tema del pasado hizo que empezaran una discusión, que terminó en agresión.
“El día domingo a las 6 de la tarde yo tuve un escenario muy difícil en mi departamento con mi expareja. Logré escapar del escenario y llamamos a la policía, la cual hizo caso omiso a las llamadas. Estuvimos llamando varias veces al número de emergencia también, no se acercaron. Esta persona logró escapar del condominio. Me dediqué a llamar al número de la mujer y decían que no atendían domingo”, dijo Ángela en “Mujeres al mando”.
“Es Hugo Castro. Él es profesor de jiu jitsu, cinturón negro. Él te puede sumicionar haciendo técnicas de artes marciales sin dejarte ningún daño. Él te puede ahorcar, dejar sin respirar tres minutos en el suelo y tú no puedes tener ninguna marca. Lo que él sabe de artes marciales mixtas es un arma”, agregó.
La mamá de la exintegrante de “América Kids” mencionó que durante el forcejeo con su expareja, ella lo arañó para no seguir recibiendo más golpes.
Sin saber que estos arañones más adelante se convertirían en aparente evidencia en su contra.
Como no encontró respuesta en las llamadas, ella optó por acudir a la comisaría para denunciar la agresión.
El comandante general de la comisaría de Monterrico determinó que la agresión fue de ambas partes. Por lo que el médico legista les dictó descanso médico a ambos. A Hugo Castro le tocaron seis días; mientras que a ella, tres.
Por último dicha institución determinó que la agresión fue mutua por lo que no abrirían investigación. Esto causó gran indignación en la influencer, quien denunció que las autoridades nunca se acercaron a su casa para interrogar a los testigos, entre ellos, su hijo de 11 años.