La tensión entre Rusia y Ucrania se intensifica tras el aumento de soldados en la frontera de ambos países. Es por ello que Estados Unidos, Alemania, la Unión Europea y la OTAN se preparan para la posible defensa del territorio ucraniano ante el paso de las fuerzas lideradas por Vladimir Putin.
Ante la concentración de 100,000 soldados en el límite de Rusia, el presidente Joe Biden se reunió el pasado lunes con el canciller alemán, Olaf Scholz para conversar sobre las acciones pertinentes ante la posible invasión. Todo ello a pesar de la continua negación de Rusia sobre algún plan estratégico para controlar Ucrania.
Al respecto, Biden aseguró que no habría ningún proyecto de gas Nord Stream 2 en caso el presidente ruso, Vladimir Putin, decida mover las tropas. Asimismo, Sholz enfatizó que su país está listo para ayudar con los fondos necesarios en caso Ucrania se encuentre en medio de un conflicto mayor.
En la misma línea, informó desde Washington que Rusia pagaría un precio muy alto si invade el país vecino. En la misma línea, su ministro de Defensa anunció planes para enviar hasta 350 tropas más a Lituania.
“La cuestión es actuar de forma rápida, ágil y decisiva, y sobre todo, de forma unida. Habrá que pagar un precio muy alto si Ucrania es atacada militarmente”, señaló Scholz.
El líder alemán tiene previsto viajar a Ucrania y Rusia la próxima semana tras reunirse con el presidente de Estados Unidos, los funcionarios de la Unión Europea (UE) y los jefes de los países bálticos. Cabe resaltar que, Sholz afirmó un trabajo estrecho con el país norteamericano para ultimar las sanciones en caso ocurra una invasión en las próximas semanas o meses.
Es importante mencionar que, a pesar de la tensión existente en el Europa, los líderes buscan una vía diplomática con Rusia para resolver la crisis. “Se trata de evitar una guerra en Europa”, señaló Scholz a ARD antes de su partida.
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El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, señalaron que está preparados "para lo peor" en el marco de las tensiones por la presencia de soldados en la frontera entre Rusia y Ucrania.
En una rueda de prensa celebrada tras la reunión en Washington, Bliken comentó que el encuentro formó parte de una coordinación más amplia frente a una crisis que podría afectar a Europa.
Es por ello que Estados Unidos, Europa y el resto de los aliados trabajan conjuntamente para un posible escenario de invasión; por ende, buscan garantizar el suministro energético.
"Actuamos unidos para defender los principios que son el corazón de la estabilidad y la prosperidad", indicó Blinken.
Además, remarcó que las acciones dependerán de la respuesta del presidente de Rusia, Vladimir Putin, ante la posible invasión a Ucrania.
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Durante las últimas horas el servicio de inteligencia de Estados Unidos alertó una posible invasión exprés hacia el territorio ucraniano.
Al respecto, los datos difundidos señalaban que en solo dos días las tropas de Vladimir Putin podrían tomar control de la capital y provocar alrededor de 50.000 víctimas.
Según los cálculos estimados por el servicio de inteligencia, se contabilizaron 83 batallones rusos con aproximadamente 750 soldados cada uno, los cuales está preparados para un posible asalto a Ucrania. Dicho escenario generaría cerca de cinco millones de refugiados que escaparían del conflicto armado entre ambos países.
En la misma línea la agencia Reuters difundió imágenes satelitales de una empresa privada que mostraba detalles sobre maniobras militares en la frontera de Bielorrusia con Ucrania.
Asimismo, imágenes de Maxar Technologies mostraron unidades militares armadas con misiles, lanzacohetes múltiples y aviones de ataque que se habían desplegado en Bielorrusia cerca la frontera con Ucrania.