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30 Nov 2021 | 12:58 h

COVID-19: conoce los síntomas de la variante Ómicron | VIDEO

La nueva cepa de coronavirus pone en alarma nuevamente al mundo entero.

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    Ómicron es la nueva amenaza que pone en tensión al mundo

    El mundo vuelve a ser amenazado nuevamente y esta vez por la nueva variante del coronavirus: ómicron. La presidenta de la Asociación Médica de Sudáfrica, Angelique Coetzee, fue la primera en alertar sobre el peligro que tiene la reciente variable de la COVID-19.

    La funcionaria aseguró que, hasta el momento, todos los contagiados de ómicron han presentado síntomas muy leves.

    “Lo que estamos viendo ahora en Sudáfrica, y recuerden que estoy en el epicentro, es extremadamente leve. No hemos hospitalizado a nadie aún. He hablado con otros colegas y el panorama es el mismo”, declaró Angelique Coetzee en diálogo con la BBC.

    El primer paciente que atendió la doctora con la variante Ómicron fue el pasado 18 de noviembre. La persona, de 30 años, tenía un poco dolor de cabeza, pero no tenía dolor de garganta. Incluso, no tuvo tos ni perdida de gusto u olfato.

    Lamentablemente, el bajo porcentaje de vacunación en África permite las apariciones de nuevas variantes de coronavirus, según indicó la propia Organización Mundial de Salud.

    ¿Cuáles son los síntomas?

    La OMS indicó que las infecciones aumentaron en las últimas semanas tras la detección de la nueva variante Ómicron. La B.1.1.529 es similar a la Beta y fue identificada en Sudáfrica.

    Según las autoridades, los síntomas son inusuales, pero leves y la fatiga extrema es la más palpable en todos los casos identificados.

    Sin embargo, lo que más sorprenden que los contagiados de Ómicron no sufren de la perdida de olfato y el gusto, pero sí se aparecía una elevación del ritmo cardíaco y fiebre muy alta. También se presenta dolor muscular. En ese sentido, se alertó que el peligro se complicaría más en los no vacunados.

    La OMS quiere analizar casos en las personas que ya se inmunizaron contra la COVID-19 para comprobar la eficacia de las dosis.

    "A pesar de las incertidumbres, es razonable suponer que las vacunas disponibles actualmente ofrecen cierta protección contra la enfermedad grave y la muerte", sostiene.