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30 May 2020 | 18:40 h

¿Por qué los fumadores son propensos a contraer COVID-19?

En el marco del Día Mundial sin Tabaco, los expertos del Minsa explican la relación del coronavirus y el uso de cigarrillos.

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    Este es el mejor momento para dejar el tabaco. Investigaciones realizadas por científicos del Laboratorio Cold Spring Harbor en Estados Unidos revelarían que los fumadores son más vulnerables a las infecciones graves por COVID-19, señalaron especialistas del Ministerio de Salud (Minsa).

    El director de Promoción de la Salud del Minsa, Alexandro Saco, indicó que esto se debe a que el humo de los cigarrillos estimula a los pulmones a producir más la proteína que el coronavirus usa para entrar en las células humanas.

    Por ello, los fumadores son 1.4 veces más propensos a presentar síntomas más severos de COVID-19 y 2.4 veces más susceptibles de ingresar a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), según asevera el mismo estudio.

    Además, los consumidores de tabaco en cualquiera de sus presentaciones, sea tradicional o el cigarrillo electrónico, tienen más probabilidades de adquirir una enfermedad o una capacidad pulmonar reducida, lo que a su vez aumentaría su riesgo para enfermedades graves.

    La experta explicó que ciertos artefactos usados para fumar, como las pipas de agua, suelen fomentar el uso compartido de boquillas y mangueras, lo que puede facilitar la transmisión de la COVID-19 en ambientes comunitarios y sociales.

    Wapa, este 31 de mayo que se conmemora el Día Mundial sin Tabaco, es importante alentar a los Estados Miembros del Convenio Marco para el Control de tabaco (CMCT) a que tomen las medidas necesarias para ayudar a las personas a dejar de fumar y evitar la iniciación, especialmente entre jóvenes.

    ¿Qué opina la OMS sobre el consumo de tabaco?

    Según la Organización Mundial de la Salud, el consumo de tabaco es uno de los principales factores de riesgo de varias enfermedades crónicas, como el cáncer y las enfermedades pulmonares y cardiovasculares. A pesar de ello, su consumo está muy extendido en todo el mundo. Varios países disponen de leyes que restringen la publicidad del tabaco, regulan quién puede comprar y consumir productos del tabaco, y dónde se puede fumar.